El buen presente de Bozán en la UdeC le permite sacarse una pesada mochila
El fútbol siempre da victorias y derrotas. Francisco Bozán, el entrenador de la UdeC, ha cargado una mochila pesada en su corta historia como técnico, como fue el descenso de Barnechea a Primera B en su primera experiencia al mando de un elenco.
"Todos sabían que yo venía de un descenso con Barnechea y que perdimos la categoría. Tenía un desafío personal de cumplir con el objetivo de la institución (CD UdeC) para el cual fui contratado", sostuvo el DT.
Tras ese paso por el cuadro del oriente de Santiago, Bozán llegó a una UdeC amenazada por el "fantasma" del descenso a fines del 2016. A su arribo, la exigencia del club deportivo auriazul fue muy clara con su nuevo deté: debí salvarlo de caer a la Primera B, tal como pasó en 2012 con el "Nano" Díaz.
Bozán, en cuestión, asumió con un equipo que no armó y que solo pudo incorporar tres jugadores a inicio de este año. Con todo, fecha a fecha fue sumando puntos que a la UdeC le permitió zafar del descenso, pero además se encaramó a puestos de avanzada en el campeonato de Clausura, donde el cuadro remató tercero por delante de Colo Colo y U. de Chile, el campeón.
De la amarga sensación que otorga vivir un descenso, ahora Bozán goza con la otra cara de la medalla: su primera clasificación a una copa internacional, donde tendrá que luchar con su plantilla para ir a la Copa Libertadores o en su defecto a la Sudamericana, si es que pierden la serie ante los "rojos".
"No quiero ser injusto porque me pareciera un objetivo personal y siento que los técnicos tenemos que estar supeditados a los objetivos institucionales. Somos contratados por una institución para salvar al equipo del descenso en ese primer campeonato (Clausura), en el segundo torneo (Transición) logramos lo mismo y siento que este objetivo es gratificante en lo que logra el equipo porque no solo se salva con un buen trabajo, sino que se logra meter tercero y corre la lista para un segundo puesto en el Clausura", afirmó Bozán en la previa del duelo de esta tarde ante Unión, a partir de las 20:00 horas.
"Siento que el mayor objetivo que logramos fue salir de esa presión, convencernos que trabajando se podía salir del descenso y, en lo personal, era salvar al equipo de dos descensos", agregó el entrenador, quien recalcó que "si nos salvamos de dos descensos y clasificar a una copa, es satisfactorio, es un objetivo más que cumplido porque peleábamos por no descender".
SIRVE GANAR
Instalados en esta final ante Unión Española, la cual hoy vive sus primeros 90 minutos en el Estadio Ester Roa, la UdeC buscará ganar, pero por sobre todo, saldar una deuda que en el reciente torneo de Transición quedó al debe, que fue triunfar en casa.
"Fuimos un equipo que no logró ganar muchos partidos en casa, apenas uno, pero empatamos ocho y en eso estuvimos cerca de la victoria y no lo logramos abrochar, que es una de las tareas pendientes", sentenció Bozán.
Analizando al rival de esta jornada y la serie, Bozán no cree que los hispanos lleguen heridos, más allá que dejaron escapar el título que en algún momento del campeonato, se les vio seguros de sumar una nueva estrella.
"Siento que Unión llega con la responsabilidad de ganar algo porque hasta ahora están en la Sudamericana, que es como el premio de consuelo. La Copa Libertadores es el premio real. Siento que nos vendrán a ganar y estamos los dos en la misma posición por mucho que ellos hayan salido en este campeonato segundos en este campeonato", dijo.
CON LO MEJOR
Para este compromiso en Collao, Francisco Bozán lamenta la baja del ariete Carlos Escobar por suspensión. Para la revancha del próximo miércoles en Santa Laura estará habilitado para jugar.
Una tentativa alineación será con C. Muñoz; Berríos, F. Muñoz, Mencia y De la Fuente; Manríquez, Camargo y Droguett; Meneses, Barreto y Benítez.