En los últimos años el país y el Gran Concepción han sido testigos de un boom de construcciones de edificios de oficinas, departamentos, condominios y centros comerciales, entre otros.
Esto no solo ha traído los cambios culturales que implica vivir o hacer familia en lugares de alta concentración humana, sino también un nuevo campo laboral, que son las administraciones de estos espacios comunitarios.
Sergio Purcell, presidente del Colegio de Gestión y Administración Inmobiliaria de Chile (Cgai), que cuenta con 150 socios en el país, estuvo en Concepción con el fin de agrupar a los administradores de edificios y condominios del territorio bajo un organismo que represente a la actividad. Esto, con el objetivo de profesionalizar el rubro, por lo que profundizó en este trabajo y las modificaciones que está experimentando la sociedad chilena al coexistir en este tipo de construcciones.
FUENTE ESTABLE
El ejecutivo indicó que así como crecen las construcciones, también lo hace la cantidad de administradores. "Es una fuente laboral bastante estable, porque se están acabando los terrenos y, por lo tanto, la única forma de seguir construyendo es en altura. Bajo ese escenario, se están generando puestos de trabajo", apuntó.
A nivel país se están levantando más de miles edificios, lo que implica unos 25 mil personas que trabajan en torno a estas construcciones.
Todo esto, indicó el timonel, ha traído consigo un cambio cultural importante, porque mucha gente hoy vive en condominios, lo que genera un problema serio, que es que las personas no saben vivir en comunidad, que sus derechos terminan cuando comienzan los de su vecino y piensan que el personal del edificio lo pagan ellos es y su personal, cuando en el fondo es la colectividad.
Otro elemento es el pago de los gastos comunes, algo de lo cual no había costumbre, porque antes de llegar a un lugar de convivencia mayor, venían de un casa donde este ítem no estaba considerado, pero sí abonaba contribuciones, derechos de retiro de basura o mantención de jardines. "Actualmente, esto es lo mismo, pero traducido a un gasto común. Antes pagaba un jardinero en su casa y ahora debe pagar una proporción acá, al igual del ascensor", ejemplificó.
Por ende, remarcó que necesariamente debe experimentarse un cambio cultural, porque la única forma de seguir creciendo es hacia arriba.
Además, hizo ver que con la modificación de la ley de copropiedad ha cambiado la gestión del administrador.
responsabilidad penal
y legal
"Anteriormente, el administrador no tenía muchas obligaciones. Hacía la mantención y en el fondo, un poco de vida social. Hoy la situación es muy distinta, pues tiene muchas responsabilidades de tipo penal y legal. Por ende, es un gestor de varias normativas importantes, como la certificación de gases, de ascensores y a futuro puede que también la eléctrica, sumada a la del personal, como contrataciones, despidos y finiquitos", destacó.
A esto se agrega que los edificios no son como los antiguos, que eran de menos pisos, con un número de departamentos bajo y con un mayordomo que vivía ahí. Los de ahora cuentan con locales comerciales y la gestión es más rápida.
Asimismo, para minimizar los riesgos, a pesar de que no son empresas de seguridad, Purcell destacó que deben colocar trabas a los ladrones, para lo cual hay que instalar cámaras de seguridad, sensores para el rostro que permiten abrir o cerrar una puerta, un ojo, una huella digital o el celular como medios de seguridad.
A lo anterior se suman otras complejidades, como el aseo de los elevadores, que concentran el 60% de los reclamos y problemas de convivencia, un tema importante. En ese sentido, el dirigente gremial recalcó que cada condominio se rige por su propio reglamento que establece la existencia de un instructivo propio que elabora la inmobiliaria y lo pone en conocimiento de la gente.
CAPACITACIONES
Sebastián Ruiz Alsina, gerente general del Cgai, detalló que en la Región del Biobío existen más 1.000 copropiedades; el 80% concentrado en el Gran Concepción y la demanda laboral en este rubro ha crecido en forma exponencial.
Ruiz afirmó que anualmente tienen una solicitud de 5.000 puestos de trabajo. "Se están levantando entre 660 a 670 copropiedades al año de norte a sur del país, que son datos que obtenemos a través de las direcciones de obras municipales y la Cámara Chilena de la Construcción en sus informes".
Dado esto, las administraciones cada vez se van especializando en diferentes ramas, como eficiencia energética, de agua, consumo de gas, en normas de certificaciones. Por eso, Ruiz cree que si un administrador no está en capacitaciones continuas, será muy difícil que pueda ejercer su labor y beneficiar a la gente que vive en copropiedad.
Es así que como gremio están explorando realizar especializaciones con universidades, aunque como organización preparan a los socios y al personal de estos lugares.