Viña Cucha Cucha presentó sus vinos en Santiago
Un valle mágico, con historia y tradición, en el cual nació el vino chileno. Eso es Itata, un territorio que hace tiempo está dando que hablar por sus vinos distintos, rústicos y con personalidad
De esta zona provienen los vinos de Viña Cucha Cucha, creados por la enóloga Ana María Cumsille, quien tiene más de 20 años de experiencia, y que se sumó a este proyecto el 2014. "La primera vez que vi este valle no lo podía creer. Los colores, la forma de sus plantaciones y cómo la parra vive y se agarra a lugares tan salvajes en forma natural me sedujeron y eso me ha motivado a estar constantemente investigando y recorriendo Itata. Acá se respira y se vive el vino", señala.
Ahora, ante enólogos, cronistas gastronómicos y diversos expertos, la Viña Cucha Cucha presentó en el Hotel W, en Santiago, sus vinos País, Cinsault (ambos cosechas 2016) y Mixtura 2016.
Lo que busca Viña Cucha Cucha, agrega Cumsille, es potenciar el tesoro vitivinícola de esta zona. Por ello, sus principales plantaciones son País, Cinsault y Moscatel, cepas que han siendo revaloradas por su historia, tradición y gracias a sus vinos jugosos, simples y cotidianos. En total, poseen 120 hectáreas en 6 parcelas distintas, en la comuna de Portezuelo, en Ñuble.
Hoy, Viña Cucha Cucha, liderada por Patricio Middleton, su gerente, pone nuevamente al vino como protagonista de esta zona. "Hasta el 1920, el 50% de la producción de vino en Chile se hacía en Itata. Queremos que este valle vuelva a ser protagonista", señala.
Para ello, se está realizando además un trabajo asociativo con los viñateros del Valle. A través de seminarios técnicos, asesoría directa por parte de profesionales y apoyo a la gestión comercial, el equipo de la viña trabaja con diversas agrupaciones, como Guarilihue, Quinchamalí, Ránquil, Portezuelo, Rahuil Alto y Cavas de Portezuelo, lo que significa un apoyo directo a más de 180 productores locales.