Secciones

No todo lo que brilla es oro

E-mail Compartir

Cuando se inicia la primavera y comenzamos a percibir un clima más cálido, donde dejamos atrás los abrigos y la gente comienza a vestir más ligero, con tonos más claros y telas más livianas, se inicia también un periodo de angustia para un importante sector de la población, quienes ven en la llegada del calor un verdadero enemigo a su autoestima.

Miles de personas inician en esta época del año desesperadas medidas para eliminar los kilos de más y poder llegar en mejor condición física al verano, sin embargo, algunos métodos utilizados simplemente no dan resultado o, peor aún, pueden llegar a poner en peligro la vida de las personas: dietas extremas, ejercicio sin supervisión o pastillas inhibidoras de apetito, son algunos de ellos.

Otras de las alternativas que ofrece el mercado son las tradicionales fajas modeladoras o reductoras, que son básicamente prendas confeccionadas con materiales especiales y cuyo objetivo es "amoldar" ciertas zonas del cuerpo por medio de la compresión selectiva.

Si bien estas fajas pueden tener un buen efecto mientras se utilizan, dicho resultado no se mantiene en el tiempo, a pesar de que quienes las recomiendan aseguran lo contrario llegando incluso a prometer la eliminación de grasa a través de la sudoración.

Por el contrario, su uso prolongado puede generar más desventajas que ventajas, tales como un aumento de la presión abdominal, con la consiguiente compresión de órganos internos y del retorno venoso desde las extremidades inferiores, lo que se puede traducir en edemas y problemas circulatorios como trombosis o agravamiento de patologías como la incontinencia urinaria y malestar abdominal por compresión gástrica.

Además, su uso prolongado puede generar problemas respiratorios debido a la presión del diafragma o la compresión inadecuada de nervios, principalmente en las extremidades, debido a diseños no personalizados que pueden provocar síndromes dolorosos.

Es sumamente importante estar informados acerca de lo que ofrece el mercado y diferenciar estas prendas de las fajas postquirúrgicas, las que sí cumplen un objetivo terapéutico. Sin embargo, no existen las recetas milagrosas, por lo que es necesario estar alertas y no crearse falsas expectativas a través de publicidad que promete algo que, simplemente, a largo plazo no va a cumplir.

Cirujano Plástico

Tendinitis: la patología tras las consolas que aqueja a los niños

E-mail Compartir

La tendinitis era una enfermedad considerada laboral, sin embargo, hoy se presenta con mayor frecuencia en menores y adolescentes que pasan mucho tiempo jugando con dispositivos electrónicos. Pero no es la única consecuencia, otro tipo de problemas son desviación de columna, escoliosis y lordosis.

A través de los aparatos tecnológicos los niños aprenden, se comunican y entretienen. Sin embargo, el tiempo ocupado en una actividad repetitiva ha traído una serie de consecuencias físicas: tendinitis, escoliosis temprana, desviación de columna, son algunos de los casos que están llegando hasta las consultas de especialistas.

"Utilizar estos dispositivos genera que un acto motor tan fino y de tanta precisión como son las actividades de uso de segmentos corporales digitales, que los niños tengan una activación excesiva de los músculos de las zonas de la mano y muñeca, que muchas veces deriva en una contractura", señala Sandra Sanhueza, directora de la carrera de Kinesiología de Santiago de la Universidad San Sebastián.

La experta recomienda educar a los niños en el uso de pausas activas. "Si los niños llevan muchos minutos jugando con algún dispositivo, tienen que parar un momento y realizar otro tipo de actividad como: andar en bicicleta, salir a la calle, ir a una plaza, caminar, cocinar", sugiere.