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Propiciar el autocuidado en el trabajo previene estrés laboral

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De las más de cinco millones de licencias médicas que se aprobaron en 2016, según cifras de la Superintendencia de Salud, 42% fue por enfermedades de la esfera de la salud mental. Entre las principales causales de éstas, el estrés laboral ocupa un lugar protagónico.

En esa línea, datos de la empresa de reclutamiento Page Personnel, 61% de la población chilena ha declarado que en más de una ocasión ha sufrido de esta condición que generalmente aparece cuando las exigencias del trabajo superan a las capacidades del individuo, interfiriendo tanto en la productividad laboral como en la calidad de vida, ya que entre sus síntomas se destacan ansiedad, cansancio, pérdida de interés, depresión y ausentismo laboral.

Considerando esto, Carolina Milla, Interim Senior Consultant de PageGroup, hace hincapié en la importancia de prevenir el estrés mediante estrategias de autocuidado, considerando rutinas en el entorno laboral que contribuyan a generar balance entre el éxito laboral y el bienestar integral del trabajador. Esto, porque el Ministerio de Salud detalla que entre los principales gatillantes del estrés laboral están la sobrecarga de trabajo, presiones de tiempo para cumplir tareas y metas, y una supervisión deficiente.

HÁBITOS DE AUTOCUIDADO

Por lo expuesto, su primer consejo es respetar los horarios personales y ser productivos en relación al tiempo. Agrega que también es importante a aprender a delegar y pedir ayuda cuando se necesita, pues esto evita la sobrecarga, factor que como constante volverán en un hábito la sensación de estrés en el trabajo.

También hay que comunicarse de manera asertiva, expresando correctamente ideas, sensaciones y opiniones, lo que se traduce en confianza en el ambiente y fortalece el sentido de pertenencia. En la vereda contraria, plantea que prácticas como chismes y ocultar información sólo derivan en desconfianza y malestar en el ambiente, por lo que se deben evitar.

Carolina Milla no deja de mencionar que valorar el propio trabajo, dándole sentido personal aporta a sentirse útil y fortalece la autoestima, y se dedique a su trabajo.

Por último, el trabajador no debe pasar por alto dedicar tiempo a actividades recreativas como el deporte o compartir con seres queridos, clave para balancear la vida personal con la profesional.

"Una organización que fomente estos hábitos dentro de la cultura organizacional estará promoviendo un equipo más eficiente, comprometido con su trabajo y relaciones laborales armónicas, teniendo como resultado que las personas logren un mayor equilibrio en sus vidas", finaliza.

Vacunar a perros y gatos es la medida fundamental para prevenir la rabia

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Sin duda la relación entre seres humanos y animales ha formado parte importante de la historia. Pero, así como este vínculo trae consigo innumerables beneficios para las personas, también podría conllevar algunos aspectos negativos que precisan tomar precaución, como la transmisión de algunas enfermedades entre ambas especies.

Una de éstas es la rabia, una patología vírica infecciosa que puede ser mortal una vez que comienzan a aparecer todos los síntomas clínicos. Por la misma razón, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora cada 28 de septiembre el Día Mundial Contra la Rabia, para crear campañas preventivas hacia la población, educando sobre el contagio y también cómo se puede evitar.

Claudio Báez, médico veterinario y secretario de Estudios de Medicina Veterinaria de la Universidad San Sebastián, explica que la rabia es una enfermedad viral, zoonótica, es decir transmitida desde los animales, en particular desde mamíferos al hombre. "El virus rábico provoca en el ser humano una infección inflamatoria aguda del sistema nervioso central (encefalitis), cuyo resultado invariablemente es la muerte del hombre", detalla.

El periodo de incubación del agente vírico puede variar, pues desde que el virus rábico ingresa al organismo ordinariamente por una mordedura de un portador, como un perro, gato o murciélago, hasta que aparece la enfermedad, suele ser de uno a tres, pero puede oscilar entre una semana y un año.

Tal como lo menciona Báez, los primeros síntomas de esta enfermedad son la fiebre acompañada de dolor, hormigueo, sensación de picor o quemazón en el lugar de la herida donde ocurrió la mordedura. "A medida que el virus se propaga por el sistema nervioso central, se produce una inflamación progresiva del cerebro y la médula espinal, que acaba produciendo la muerte", agrega.

En ese sentido, el veterinario hizo hincapié en que la obligación de los dueños de vacunar a sus mascotas, felinos o caninos, en zonas donde se registren casos de rabia es primordial. "Hay que vacunar a nuestros animales, incluso si se han registrado casos de rabia por otros animales como los murciélagos, porque entre estas especies se produce la infección", advierte.

CONTAGIO Y PREVENCIÓN

Si bien la manera más conocida de contagio son las mordeduras, el médico veterinario recalca que es la saliva de los animales infectados lo que provoca la enfermedad. Sin embargo, también se han documentado infecciones por inhalación del virus, a través de aerosoles, y exposición a tejidos nerviosos infectados con virus rábico como los trasplantes y heridas en la piel.

Tal como otras enfermedades infecciosas, cualquier persona podría contraer rabia, lo que quiere decir que es una susceptibilidad universal. En ese sentido, el profesional destaca que "las personas que, por razones laborales, tienen contacto directo con animales susceptibles de transmitir rabia (mamíferos urbanos o silvestres, incluso exóticos) y que se encuentran expuestos a mordeduras, se encuentran en mayor riesgo de contraer la enfermedad".

De igual forma, Báez afirma que si las personas detectan murciélagos en casas o habitaciones, especialmente de día, la recomendación es comunicarse con la Seremi de Salud, para que expertos en el manejo de estos animales procedan a su captura. "En caso de no poder hacerlo, la recomendación para su captura es hacerlo protegiéndose la manos con guantes de cabritilla u otro material resistente", sugiere.

Marlenne Ortiz, docente de Ingeniería en Prevención de Riesgos de Duoc UC sede Concepción, especificó que así como la vacuna a perros y gatos es el primer paso para prevenir, también lo es actuar al instante ante una mordedura. "Si fue mordido por un murciélago, o tuvo contacto con la saliva del animal rábico, hay que lavar con agua y jabón la parte afectada, para luego concurrir al instante al centro asistencial más cercano", recomienda.

Desde allí, Ortiz advierte sobre la presencia de murciélagos, donde dar aviso por sospecha es fundamental. "Si el perro o gato fue mordido, o jugaron con esta especie, hay que intentar cuidadosamente capturar al animal sospechoso de estar contagiado y entregarlo directamente", advierte.

Otra medida de prevención que hay que tomar en cuenta es tener cuidado cuando las mordeduras no se notan. "Debido a que los murciélagos tienen dientes muy pequeños, su mordedura deja marcas poco visibles", apunta.

FACTORES DE RIESGO

Jessica Fuentes, docente de técnico en Enfermería de Duoc UC sede Concepción, agrega que algunos de los factores de riesgo más relevantes para contraer rabia son vivir en zonas rurales, estratos de pobreza y vulnerabilidad asociado a deficiencias sanitarias.

Según el contexto anterior, la especialista asegura que "en estos lugares no hay controles animales bien establecidos, con la consiguiente abundancia de perros callejeros sin cobertura de vacuna y la existencia de poblaciones de murciélagos".

De acuerdo a las cifras que entrega la Organización Mundial de la Salud (OMS), la rabia es una enfermedad que afecta a más de 150 países y territorios, donde la gran mayoría de las muertes se produce en el ser humano y el perro es la principal fuente de infección. De hecho, en el 99% de los casos de transmisión a los humanos, la enfermedad es contagiada por los caninos.

Otra inquietante cifra es que se trata de una enfermedad presente en todos los continentes del mundo, excepto en la Antártida, y más del 95% de las muertes humanas se registran en Asia o en África.

A su vez, Fuentes quiso agregar que pueden existir dos formas de presentación de esta enfermedad. La primera, conocida como "rabia furiosa", donde el paciente presenta manifestaciones de hiper excitabilidad y algunas manifestaciones relacionadas con fobias. "Se produce, además, edema cerebral progresivo llegando a producir la muerte por falla cardiaca", cuenta.

La otra forma es conocida como "rabia paralítica" donde el virus ataca al sistema muscular produciendo lentamente parálisis de éste, llegando finalmente con una evolución más lenta a la muerte. "En el último caso de manifestación puede existir la confusión en el diagnóstico de la enfermedad", finaliza.