La fallida licitación del Hospital Las Higueras de Talcahuano no sólo generará un retraso estructural. También implicará que no se podrá reducir en el corto plazo la brecha de personal que tiene el recinto de salud.
"Se está trabajando como si el recinto estuviera normalizado, pero sin estarlo. Eso ha significado una mayor carga laboral para los trabajadores", declaró la presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud (Fenpruss) del Hospital Las Higueras, Bexsabe Vidal.
Hace unos días la presidenta de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats) del recinto, Ángela Catriao, también dio cuenta que este retraso ha implicado que el Gobierno no adelante recursos para contratar funcionarios, que son necesarios para entregar una mejor calidad de atención a los pacientes.
Las dirigentas mencionaron que a fines de junio se terminará el contrato de un grupo de trabajadores a honorarios, lo que profundizará esta diferencia.
La normalización del establecimiento tiene relación con la ampliación y adecuación de los espacios a la nueva normativa de salud. El proyecto para esta última etapa lleva dos licitaciones fallidas y ya se subieron las bases para una tercera, concurso que estará abierto hasta el 14 de julio.
BRECHA
Bexsabe Vidal contó que a lo menos son 200 los cargos que tendrían que llenar cuando comience por fin la construcción de la Tercera Etapa de Normalización.
La dirigenta de la Fenpruss aclaró que pese a que el recinto tiene más pabellones y más salas, no se ha podido incluir más recurso humano o de implementación. Tal situación ha implicado una carga laboral mayor para los casi 1.700 funcionarios que hay en el recinto asistencial actualmente.
"Influye en ocasiones en el clima laboral, por el exceso de trabajo que se tiene. Por eso, imprescindible que se realice la Tercera Etapa lo más rápido posible", contó la presidenta de la Fenpruss.
El presidente del capítulo médico del Hospital Las Higueras, Wladimir Hermosilla, también sostuvo que la normalización del recinto no sólo traerá consigo metros cuadrados, sino que equipamiento, camas más modernas y también "recursos humanos con normas ministeriales más actualizadas, que nos permitirá entregar mayor confort a los pacientes que están hospitalizados".
Hermosilla declaró que este nuevo retraso seguirá generando una sobrecarga en los funcionarios de atención más directa de los usuarios (enfermeras, matronas, técnicos en enfermería u otros), provocando un estancamiento del desarrollo del hospital.
"Atenta en la calidad de atención que estamos entregando, la que podría ser mejor", enfatizó.
Sobre ese punto, Bexsabe Vidal expuso que la normalización de la Tercera Etapa, que principalmente corresponde al área de hospitalización, permitirá un espacio físico que hoy no existe.
"No hay lugar físico en donde dejarlos (a los pacientes) luego de una intervención quirúrgica. Incluso se busca trabajar en red, lo que llevaría a trasladar postoperados hacia Tomé o Penco-Lirquén, porque allá están las condiciones y camas disponibles para que ellos tengan una mejor estadía, porque en Las Higueras no está el espacio físico de hospitalizarlos", sostuvo la dirigenta.
TERCERA LICITACIÓN
Por un plazo de 38 días, que comenzó el 6 de junio, se mantendrán en el Mercado Público las bases de licitación para que las empresas interesadas presenten por tercera vez los antecedentes para adjudicar las obras de la tercera y última etapa de normalización del Hospital Las Higueras.
Las dos primeras comenzaron en 2005 y 2009 respectivamente.
Pese a la incertidumbre que existe de lo que pasará en esta nueva licitación, las dirigentes de los gremios tienen la confianza de que este se concretará en este nuevo proceso. Hermosilla contó que el servicio les explicó que las modificaciones a las bases deberían facilitar el proceso para que se adjudique el proyecto.
El proyecto considera una inversión de 114 mil millones de pesos para edificar 62 mil metros cuadrados en un plazo de casi cinco años.
