"La mentirita blanca" ya está en los cines de Concepción
Lo mejor de crear cine en provincias para Tomás Alzamora, más allá de analizar los resultados del producto final, tiene que ver con percibir el apoyo incondicional que es capaz de ofrecer la comunidad de un pueblo pequeño, durante el proceso de producción.
"Eso no se da en Santiago, allá predomina la desconfianza", dice el director de la película "La mentirita blanca", que fue producida totalmente en San Carlos, con el fin de combatir el centralismo de contenidos audiovisuales.
Y es que esta cinta, que se estrenó el jueves en 14 salas nacionales, significa mucho para Alzamora. "Era un sueño filmar en mi ciudad natal. Esto empezó como un proyecto de título en 2015 y terminó como mi primera película", cuenta.
En ese sentido, el realizador de 27 años arribó ayer hasta la ciudad penquista para promocionar su ópera prima en la cadena Cinemark del mall Mirador del Bío-Bío.
En la oportunidad, también estuvo presente el protagonista de la cinta Rodrigo Salinas, junto al productor Pablo Calisto. "La idea es motivar a la gente para que se dé el tiempo de entrar a las salas y ver la película que relata una historia llamativa y diferente", dice Alzamora.
El contenido de la comedia gira en torno a las noticias falsas. En 80 minutos, la producción relata la historia de un reportero (Salinas), que debido a la falta de hechos noticiosos en la zona, publica información ficticia.
PROCESO PRODUCTIVO
Pero por más complejo que parezca el panorama, la experiencia del director sancarlino demuestra que es totalmente factible crear cine en ciudades pequeñas.
"Para nosotros resultó cómodo producir una película en San Carlos. La clave es comprometer a la gente y ser responsables. Uno como realizador tiene que darle una vuelta y pensar en cómo se puede crear cine atractivo para que la comunidad participe", dice.
- Estamos muy conformes con todo lo que realizamos. En general recibimos el apoyo y aporte de de toda la comunidad sancarlina. Y a pesar del bajo presupuesto, pudimos contar con los elementos necesarios para la producción. La gente nos ofrecía sus casas para alojar al equipo. La tecnología la trajimos desde santiago.
- Financiamos este proyecto de manera independiente. El primer paso fue gestionar a través de una plataforma web un monto de 8 millones. Luego, la comunidad sancarlina junto a su municipio logró darnos su aporte de manera que logramos en total 13 millones.
UN
EQUIPO UNIDO
Y aunque el equipo de producción no contó con las bondades de las grandes industrias cinematográficas, de igual forma lograron sacar adelante el proyecto en un periodo de 3 años.
"´Si bien la película tiene algunos problemas, igual nos sentimos muy contentos. Hemos estado recorriendo las distintas salas donde se exhibe la película y hasta ahora hemos visto buenos resultados. Cerca de 50 personas por cine la ha visto hasta ahora", señala Pablo Calisto, productor de la cinta.
-(Calisto) No todo es color de rosas. Nos encontramos con una barrera bastante grande en el sentido de la distribución. Pero es parte del sistema y afortunadamente nos encontramos con Storyboard Media y ellos nos tomaron.
- Yo creo que fue un premio al esfuerzo y al cariño. Fuimos frescos y usamos un lenguaje y temática novedosa.