En mayo se ha percibido una baja en las temperaturas, las que en la segunda quincena del mes no han superado los ocho grados y que, incluso, alcanzaron los cero grados. Este escenario favorece la contaminación del aire debido a que las partículas emitidas por calefacción, locomoción e industrias no logran elevarse debido a la rigidez del mismo aire.
En Concepción no rige el decreto de Alerta Sanitaria vigente para Los Ángeles y tampoco hay plan de descontaminación como en Chillán, aunque hay uno en construcción. Pese a ello sí hay estaciones de monitoreo de calidad del aire, las que dan cuenta que a partir del 14 de mayo en Concepción se empezó a observar un aumento en la cantidad de microgramos de material particulado MP 2,5, última fecha en que las temperaturas mínimas superan los 10 grados.
Entre esta fecha y el 22 de mayo se capta un alza de hasta 80 microgramos, luego da a la baja sólo para volver a repuntar durante la última semana del mes. Hasta 79 microgramos la calidad del aire se califica como "regular".
De acuerdo a la información de la Seremi de Medio Ambiente, en la región hay 23 estaciones de monitoreo en línea, de las cuales siete de las que miden MP 2,5 se encuentran en el Gran Concepción.
Efecto
"A diferencia de lo que ocurre en Concepción, que gracias a su proximidad con la zona costera y la cuenca del Río Biobío, se generan corrientes de aire que mejoran las condiciones de ventilación para la ciudad", explica Javier Fernández, jefe de la carrera de Química Ambiental de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Ucsc).
Al respecto, Álvaro Boehmwald, director de Ingeniería en Energía y Sustentabilidad Ambiental de la Universidad San Sebastián (USS), precisa que la relación entre la temperatura y los niveles de contaminación tienen dos aristas: "Cuando caen las temperaturas se presenta un aumento de uso de calefacción o estufas, donde predomina la leña, la cual incorpora material particulado al ambiente y se traduce en contaminación".
También afirma que hay una relación estrecha entre el tipo de material ocupado para generar calor y su producción de material particulado. En cuanto a Concepción, Boehmwald coincide con Fernández sobre su ventaja geográfica, pero ve un mayor riesgo en la zona.
"El control de estas emisiones se complejiza en base a su origen. No es tan difícil si se trata sólo de contaminación que proviene de residencias, pero el caso de Concepción contempla chimeneas residenciales, industriales y alta locomoción", explica Boehmwald.
MATERIAL PARTICULADO
"Hay que tener en cuenta que el material particulado es una fracción sólida de las emisiones contaminantes y son las que quedan en suspensión", comenta Boehmwald.
Existen dos tipos medibles: el material particulado de 10 microgramos y el 2,5, siendo este último el más nocivo por su mínimo peso y tamaño. Es esta misma forma del material particulado la que cubra las mañanas y anocheceres como una nube baja de humo.
"La temperatura ambiente genera que esta capa de gases no se disipe con la premura que uno quisiera, por lo que se genera a baja altura, lo cual se puede observar en las mañanas o en las tardes, esto a raíz de que es cuando están más bajas las temperaturas", agrega el académico de la Universidad San Sebastián.
"Las diferencias de tamaño pueden venir del mismo tipo de material y explican su toxicidad. Además, el riesgo del material de 2,5 es que atraviesa nuestras defensas y se aloja directamente en el pulmón", comparte Boehmwald.
Finalmente, el director de carrera alerta que estas partículas generan altos daños a la salud y enfatiza en la necesidad de prevenir las enfermedades relacionadas.
SITUACIÓN REGIONAL
Los Ángeles, por cuarto año consecutivo, se encuentra con alerta sanitaria ambiental, la que fue decretada el primer día de este mes. Esto rige mientras entra en vigencia el Plan de Descontaminación, ya elaborado.
Chillán y Chillán Viejo, que ya cuentan con esta estrategia, también están con emergencia ambiental.
"En lugares como Los Ángeles y Chillán hay temperaturas demasiado bajas, lo que genera un proceso denominado inversión térmica, el cual impide a las partículas contaminantes elevarse y por ende se acumulan en la superficie", comenta Fernández.
El académico de la Ucsc agrega que "en el Plan de Descontaminación Atmosférica del Ministerio del Medio Ambiente se están estudiando nuevas alternativas de calefacción como las estufas eléctricas o el uso del gas natural, ya que no generan partículas nocivas para la salud ni el medio ambiente".
Dicho plan para 10 comunas del Gran Concepción (excluye a Santa Juana y Florida) aún se encuentra en su fase de participación ciudadana. El proyecto definitivo espera empezar a ser redactado en julio de este año.
CONTROLES
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, al año fallecen más de 4 mil personas por enfermedades relacionadas a la contaminación aérea. En Chile se cifra que hay 10 millones de habitantes expuestos a este riesgo.
"Esta es la preocupación por la cual se trata de poder regular o resguardar la exposición a este nivel de contaminación. Lugar donde entran estos planes de prevención que apuntan a la fuente", detalla Boehmwald.
"Se puede limpiar un poco al apuntar a las fuentes de emisión y los combustibles asociados. Si la fuente es residencial, asegurarse que la gente use leña seca y buen equipo, además de tener un buen aislamiento en el hogar", comenta el académico.
"No es algo que dependa únicamente del Estado o del gobierno de turno, es algo que la propia comunidad podría cambiar si diversificaran las formas de calefacción y el cómo se transportan. Tiene mucho que ver con nosotros", concluye Boehmwald.