Región tiene que ser capaz de tomar las oportunidades para su desarrollo
¿Es la innovación condición sine qua non para el desarrollo? Al parecer sí, y las historias de países que lo han alcanzado así lo demuestran.
Así también lo dejó en claro en su primera visita a Chile que se concretó en Concepción donde ayer dictó la conferencia "Estrategia para el Desarrollo: Innovación y Estado", el destacado profesor de Estudios de Innovación, de la Munk School of Global Affairs, de la Universidad de Toronto, Canadá, Dan Breznitz, en el hotel Atton.
El académico delineó algunos desafíos que la región debería atrapar y hacer suyos de modo de que poder alcanzar el desarrollo.
mejora continua
Invitado por el Centro de Estudios de Sistemas de Innovación y el Departamento de Ingeniería Industrial de la Universidad de Concepción (DII-UdeC), teniendo como anfitrión al académico, Pablo Catalán y siendo consultado sobre la diferencia entre innovación y valor agregado, señaló que la principal diferencia es que la innovación termina siendo un producto que se lanza al mercado. A modo de ejemplo, el motor a ignición fue un invento que pasó a ser una innovación, aunque principalmente tiene que ver con el desarrollo de un producto que genera valor para un segmento particular de la economía o de la sociedad, detalló.
Otra característica que distingue a la innovación, explica el experto, es que hay detrás una suerte de persistencia en el tiempo, incansable, en función de cómo se va generando un producto final. Por ejemplo, un Iphone es la suma de un sinnúmero de partes que fueron mejorando en el transcurso del tiempo, desde la velocidad de procesamiento, desde algún tipo de detalles con las características de la pantalla y lo mismo con los CPU, entonces el resultado final de un producto particular desarrollado responde a una serie de invenciones que se desarrollaron en algún momento y también de algunas innovaciones pasadas, pero siempre hay una mejora continua.
Dan Breznitz, durante esta corta estadía, se reunió con empresarios de la industria, académicos de la UdeC y autoridades convocadas por el Comité de Desarrollo Productivo Regional Biobío.
Hay un entusiasmo y se pueden "olfatear" dinámicas que han ocurrido en otros países y que si bien todavía no son comparables respecto de lo que pasó en los 90 en Israel o a fines de los 90 en Irlanda, lo que sí nota es que hay de mucho entusiasmo.
Lo veo en los jóvenes estudiantes. La pregunta es si van a ser capaces de aprovechar ese momento, porque en caso de que no lo hagan, esa oportunidad, ese entusiasmo o motivación pueden decaer y se pierde la oportunidad.
En países como Canadá y Finlandia, ambos sectores productivos, más el agrícola, tienen una importancia relevante y han sido espacios para el desarrollo de innovación en función de determinar las características que tienen. Hoy día, mirando cinco años atrás, temáticas como el internet de las cosas, generan innovaciones quizá no muy de moda o de estatus, pero que sí han mejorado la productividad de esos sectores y terminan siendo espacios para el desarrollo de innovaciones independientes que no sean sectores reconocidos como de alta tecnología en un principio. En ese sentido, las industrias que tenemos sí podrían ser espacios de oportunidad, pero de nuevo, hay que atrapar esa oportunidad.
Dijo que si bien es una gran oportunidad, también lo es para otras regiones. Entonces las regiones deberán darse cuenta rápidamente cuáles son las oportunidades para ellos y atraparlas y eso determinará cuáles van a ser los ganadores.