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Animales Nocturnos: un thriller oscuro y diferente

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La película cuya ausencia más ha dado que hablar en los nominados a los Oscar a Mejor Película 2016, acaba de llegar a las salas nacionales. Se trata de "Animales Nocturnos", thriller dirigido por Tom Ford y protagonizado por Amy Adams, Jake Gyllenhaal, Michael Shannon y Aaron Taylor-Johnson.

La cinta cuenta la historia de una mujer perteneciente a la socialité norteamericana, que en medio de una crisis matrimonial recibe un manuscrito de la nueva novela de su ex esposo, con una dedicatoria escrita especialmente para ella.

Así, la mujer leerá (y prácticamente vivirá) el texto, al tiempo que conocemos su historia en distintos escenarios temporales.

A pesar de que la trama es confusa y poco clara en un principio, "Animales Nocturnos" es de esos thrillers bien pensados, en el cual una vez superado el primer acto nos vemos completamente inmersos en esta historia. Los saltos temporales y las distintas narrativas está cuidadosamente trabajadas, siendo fácil para el espectador comprender cuándo estamos viendo el pasado, presente o futuro.

Como era de esperar en un elenco de este calibre, las interpretaciones son de primer nivel. Amy Adams es fantástica en este rol de mujer de clase alta, que pese a querer formar su propio camino, es seducida por la vida de lujos y comodidades.

Pero el punto alto de esta producción sin dudas es Michael Shannon, que entrega una de las mejores interpretaciones de toda su carrera. La nominación al Oscar a Mejor Actor de Reparto está totalmente justificada e incluso podría dar la sorpresa en la ceremonia del 26 de febrero. Similar es lo que ocurre con Aaron Taylor-Johnson, que se transforma en un villano despreciable, al punto de ser intolerable en más de una escena (algo que habla muy bien de su interpretación).

En cuanto a sus temáticas, "Animales nocturnos" aborda situaciones sumamente complejas, con una narrativa que permite ahondar en emociones profundas, que el espectador deberá intentar descifrar. Porque en este metraje de Tom Ford no hay un abuso de la exposición de información, sino todo lo contrario, se deja a la libre interpretación mucho de lo que vemos en pantalla.

Sin embargo, el defecto más evidente de la cinta son precisamente algunas obviedades, sobre todo en sus últimos 20 minutos, que no dan precisamente en el tono que mostró el metraje en sus 115 minutos.

remakes

Sin ser una obra de arte, probablemente esta sea la mejor película de Tom Ford a la fecha, y uno de los thrillers más interesantes que dejara el 2016. De todas formas, es una cinta recomendada para aquellos que gusten del cine pausado y complejo.