Teatro Regional avanza con dudas sobre la futura gestión
Si los plazos se cumplen, tal como ha sido la tendencia hasta ahora, dentro de un año el Teatro Regional del Biobío estaría cumpliendo un mes de funcionamiento. O sea, la inauguración y algunos espectáculos podrían ser algunos de los hitos del anhelado espacio artístico que, técnicamente, se remonta a 1997, cuando comenzó a proyectarse el Teatro Pencopolitano.
Sin embargo, y pese a que el edificio de 9.100 m2 proyectado en cinco niveles toma cada vez más forma; en términos administrativos y de programación aún tiene interrogantes. La razón: no hay nada armado, aunque las ideas no faltan y la proyección para su inauguración sea octubre de 2017.
"Efectivamente, el avance de la obra se condice con lo programado. Hoy estamos en el 40% y eso es mucho que decir. El MOP ha jugado un papel relevante y tanto la Corporación Teatro Regional del Biobío como el Consejo de la Cultura estamos involucrados permanentemente con ellos y la empresa", dice Mario Cabrera, presidente del Directorio de la citada corporación.
En el cargo desde agosto del año pasado, Cabrera apunta que la gestión administrativa se ha desarrollado a partir de una agenda compartida entre el Directorio y el Consejo. Menciona que el plan de gestión original fue licitado hace algunos años y diseñado por una consultora que atendía a un teatro construido antes.
"Lo que hemos hecho es ver la columna vertebral de ese trabajo, adecuarlo y actualizarlo. Son herramientas nada más, que dan un lineamiento, pero con la llegada de la gerencia ese trabajo debe florecer en otros ámbitos", comenta, acotando que ese cargo y nombres de su equipo debe estar armado en diciembre.
"Ahí debemos contar con los primeros 80 millones de pesos, que permitirán realizar el concurso del gerente y parte de su equipo", indica en relación a lo que define como la primera remese de los $ 600 millones asignados por el Core Biobío.
- No hay avances muy concretos. Esto ha estado supeditado a los recursos financieros que conllevan la contratación del equipo. Es trabajo de éste la parrilla. Los directorios dan "directrices" en estos ámbitos, no arman parrillas. Ahora, como tenemos algunos directores con experiencias en el tema, están viendo y revisando las carteleras de los teatros parecidos a nivel nacional. Sabemos que los estatutos nos imponen una impronta que queremos resaltar en esa parrilla: "un espacio cultural que valorice lo mejor de lo nuestro y releve la diversidad cultural como Región".
- La excelencia de lo nuestro, entendida como lo mejor de las distintas disciplinas, al servicio cultural de la población general de la Región, atrayendo aquellas artes escénicas nacionales o extranjeras que dialogan con valores universales de la condición humana.
- Que sea más de un hito. Una programación que se extienda en el mes. Es el Teatro Regional y celebraremos con las disciplinas que nos han dado mérito nacional o internacional que están en la Región, y seguramente nos dejaremos acompañar por números nacionales y alguno extranjero.
LA COMUNIDAD ARTÍSTICA
Aunque algunos artistas y gestores locales han expresado sentirse ajenos al Teatro Regional, Cabrera comenta que se han hecho contactos con la comunidad artística. "El martes pasado en Los Ángeles, terminamos la cuarta actividad artístico cultural como Corporación (segundo "mapping", luego de la presentación en Tribunales en Concepción). Entre medio de estas dos acciones, realizamos conjuntamente con los artistas y el Consejo de la Cultura, el Festival de Danza y el de Teatro Independiente del Biobío. Y lo descentralizamos de Concepción, porque lo llevamos a Arauco", dice.
Cabrera suma que en cada espacio que tuvieron y lo permitía hablaron Teatro Regional. "Creo que es el camino correcto, demostrar 'haciendo' la confianza (para dichos eventos la Corporación administró 23 millones de pesos para financiar las actividades)".
- Son los dos años de construcción, donde la Corporación debe ir tomando rodaje y armando el plan. Hemos avanzado bien en algunas áreas y en otras no tanto. Justamente, esto es lo valioso, el aprendizaje antes del funcionamiento.
- No sólo lo creo, lo exigimos. La Cultura es un derecho social, su financiamiento y acceso también. Cultura es el 0.5% del gasto total del Estado.
- Eso es una vergüenza del centralismo. No tiene comentario, no tiene justificación.
- Pero construir con equidad, con decoro con las regiones. Todos valoramos esta red de centros culturales a nivel nacional de distintas envergaduras, pero en todas debe haber un aporte basal del Estado para su funcionamiento.
- Por supuesto. Tanto como el GAM. Tengo entendido que con sólo la escenotecnia de la nueva ampliación del GAM, se puede construir otro teatro un poco más pequeño que éste o financiar varios años del funcionamiento del nuestro.