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Emancipación de Ñuble para ser región mantiene divisiones

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El nacimiento de una nueva región, la de Ñuble, está a solo un paso. Aunque hay todavía opiniones divididas en torno a que tal decisión sería nefasta para la Región del Biobío, está la sensación de que este es un tema ya zanjado y, mientras algunos gremios y la academia desmitifican tales augurios, entidades empresariales apuestan a la vía contraria, es decir, a la creación de macrorregiones en vez de subdividir.

La decisión se conocería ayer tras la su vista en la Comisión de Hacienda del Senado que debía despachar la iniciativa, que crea la XVI Región de Ñuble y las provincias de Diguillín, Punilla e Itata, la instancia legislativa resolvió postergar la votación hasta el próximo martes 25, según confirmó el senador, Felipe Harboe (PPD).

Claudio Parés Bengoechea, PhD., director del Departamento de Economía de la Universidad de Concepción, fue uno de los que participó en el equipo de la UdeC que preparó el informe para la Subdere hace un par de años. Él cree que es poco probable que haya grandes impactos económico-productivos producto de una nueva, debido al poco poder que ejercen las autoridades regionales en el quehacer productivo. No obstante, agrega, "que sí podrían darse problemas de coordinación de políticas o proyectos "interregionales", como un tren Chillán-Concepción, por ejemplo, pero en la práctica esas decisiones no recaen sobre las autoridades regionales sino nacionales".

Estima que tal vez podría darse cierta competencia a la hora de identificar sectores productivos específicos como ejes del desarrollo regional, lo que debería impulsar con más fuerza al sector agrícola en Ñuble y el sector pesquero o forestal en Biobío, pero el impacto de las autoridades regionales en ese sentido es poco y, dado que es una labor más bien de coordinación.

La cuestión de la pesca artesanal fue una de las principales preocupaciones de las autoridades regionales. Es que a lo largo de los 58 kilómetros de costa comprendidos entre las comunas de Cobquecura, Trehuaco y Coelemu se concentra buena parte de la merluza que capturan los artesanales del sur de la Región del Biobío.

Según el Servicio Nacional de Pesca, existe un centenar de personas inscritas entre pescadores, buzos mariscadores y recolectores de orilla, en esta zona, donde la pesca es todavía una actividad incipiente.

Claudio Parés agrega que sí puede haber algún impacto es a nivel de los territorios que, al agruparse de manera distinta, verán cambiar sus índices de pobreza y otros, lo que afectaría vía reasignación de recursos. "De hecho, la nueva región de Ñuble atraerá una tajada mayor de Fndr, por lo que habrá más proyectos específicos para esa zona, lo que implica que dejan de hacer en otras zonas", detalló.

El economista de la UdeC, cree que en términos económico-productivos, la creación de la nueva región no genera demasiados cambios. Habrá probablemente un impacto positivo en el agregado, pero sería pequeño, incluso comparado con el gasto fiscal adicional que implica crear un nuevo aparato de gobierno regional. "Pero, desde el punto de vista cultural e identitario la creación de la región de Ñuble está más que justificada", señala.

El director de Asexma Biobío y empresario, Humberto Miguel Cerda, en base a un estudio realizado por la Universidad de Concepción, argumenta que dicho docmento demuestra claramente que la creación de una nueva región es un buen mecanismo para superar los problemas como la disminución de los índices de pobreza, pero también para aumentar el turismo o mejorar conectividad interna, entre otros..

"Se tiene las experiencia, en su momento con la creación de diferentes nuevas comunas (Chillán Viejo, San Pedro de la Paz y Chiguayante) donde el desarrollo y crecimiento de éstas fue muy positivo y con una directa relación a la gestión de las autoridades de esas comunas".

Pero, la creación de una nueva región implica nuevas autoridades, nuevas estrategias de desarrollo, nuevas posibilidades de inversiones, situaciones que solo tendrán efectos positivos", comentó.

Se ha dicho que el presupuesto inicial para la Región de Ñuble ascendería a los $19 mil millones.

Sumar no dividir

"En línea con la tendencia global y de acuerdo a nuestro estudio de percepción empresarial, los ejecutivos y empresarios han declarado en su mayoría que no están de acuerdo con la división de la región, apostando más bien por la idea de macrorregiones. No obstante nos interesa escuchar las distintas visiones y por eso estamos realizando gestiones para conversar con los promotores de la iniciativa y conocer sus argumentos, desde el punto de vista de la competitividad regional", dice Gustavo Alcazar, past president de Irade.

Desde el mismo organismo empresarial, su vicepresidente, Lorenzo Chavalos, agrega que "en nuestro último foro el ministro de Agricultura señalaba sus dudas sobre la integración entre la agroindustria de Ñuble y la plataforma logística portuaria de Concepción, considerando que ya es difícil siendo una sola región, preocupación que nosotros compartimos".

A lo anterior, agrega otra variable. "En Irade hemos realizado un decido apoyo a la Estrategia Regional de Desarrollo que involucraba una mirada integradora, potenciando la infraestructura logística de Concepción. Hoy es muy necesario conocer en detalle las oportunidades que podría significar Ñuble región y a partir de ahí construir una estrategia de integración que permita no perder sinergia ni menos competitividad", dice Lorenzo Chavalos.