Los planos reguladores (PR) atrasados generan una escasez de terrenos y esto trae consigo un paño más caro y una vivienda más elevada en costo. Así lo hizo ver ayer en Concepción Jorge Mas, presidente nacional de la Cámara Chilena de la Construcción, quien el próximo 24 de agosto deja el cargo tras dos años al frente del gremio.

El personero indicó sobre esta materia que hay una serie de factores que influyen en los altos precios de las propiedades, como la futura ley de espacios públicos o el IVA, pero "hay un punto que sí no debiera darse, porque es una cosa administrativa, y es que los planos reguladores vayan por delante".

Afirmó que no se puede crear una situación de escasez artificial de los terrenos producto de que los PR no se hace o no se terminan.

En este tema ocurre lo mismo en infraestructura, en que no existe una mirada de largo plazo respecto a lo que se quiere como ciudad. "Todos los chilenos somos víctimas y no hay autoridad que no esté de acuerdo con eso en que se trata de un problema. Esta conversación lleva años", sostuvo.

Lo anterior se debe a que no hay obligación de iniciar y terminar un PR. Entonces, añadió la autoridad llega hasta ahí y siempre van a haber opositores y se ven ciudades que crecen por partes.

En otro tema, Mas destacó, como lo contó El Sur en mayo durante la Semana de la Construcción, el tema de las necesidades que enfrentará el país en los próximos 10 años en materia de infraestructura, el que de acuerdo al gremio, es de unos US$ 151.417 millones la inversión requerida para evitar que aumenten los déficits en esta área en el período 2016-2025.

El informe -que se presentó en el seminario "Infraestructura para todos: Claves para el desarrollo continuo", realizado como parte de la Semana de la Construcción- y que elaboró por la Gerencia de Estudios de la Cchc analizó 12 dimensiones, agrupadas en tres ejes estratégicos: Infraestructura que nos sostiene o basal (Recursos Hídricos, Energía y Telecomunicaciones), Infraestructura que nos conecta o logística (Vialidad Interurbana, Aeropuertos, Puertos y Ferrocarriles) e Infraestructura que nos involucra o social (Vialidad y Transporte Urbano, Espacios Públicos, Infraestructura Educacional, Hospitalaria y Penitenciaria).

Sobre el avance de la propuesta, Mas dijo que al existir déficit fiscal, en que el Estado no cuenta con los suficientes recursos, es necesario invertir en infraestructura, porque así el país de hace más competitivo y genera más trabajo. Además, el desarrollo de esto permite mejorar la calidad de vida. "Al no haber recursos del Estado, la manera de hacer las cosas es mediante las concesiones", remarcó.

Respecto a cómo se avance en esto, ya se están ejecutando 10 proyectos por US$ 3.279 millones, de los cuales US$ 743 millones se debieran desembolsar este año. "Por tanto, estimamos que para este 2016 la inversión en infraestructura pública caerá un 2,4%".

En este ámbito, Mas señaló que tanto la Presidenta como los ministerios de Hacienda y Obras Públicas están alineados en el tema y la alianza público privada, pero "el aparataje legislativo va a su velocidad. Para manejar un volumen de US$ 2.500 millones se necesita en concesiones una estructura y para eso está en el Congreso la creación de la Dirección de Concesiones, la cual tiene que salir rápido". También se creó el Fondo de Infraestructura, para facilitar el financiamiento de la concesiones. Por ende, destacó que la voluntad política está, pero falta acelerar el proceso y crear un banco de proyectos. Esto porque si se crean ambos estamentos, faltan las iniciativas y dar continuidad al sistema.

Respecto al Biobío, subrayó que durante el primer trimestre de este año registró un crecimiento acumulado de 4% en comparación con igual periodo del año anterior. Esta cifra se explica por los favorables niveles de empleo sectorial, con casi 80.000 trabajadores ocupados, los que, sin embargo, debieran disminuir hacia el futuro, dada la caída de 27% registrada en mayo pasado de los metros cuadrados aprobados.

En el ámbito de infraestructura pública, si bien la ejecución presupuestaria tanto del MOP como Fondo Nacional de Desarrollo Regional es más acelerada que años anteriores en la Región, la participación que representa este tipo de iniciativas lamentablemente no es suficiente como para cambiar la tendencia a la baja del sector.

Ahora bien, hizo ver una noticia positiva: el inicio de la construcción del Puente Industrial sobre el río Biobío permitiría reponer los stock de inversión y mano de obra generados por la casi total finalización de la construcción de la Ruta 160 -que mejorará la conexión con la Provincia de Arauco y elevará la eficiencia en el transporte de carga forestal, además de otras actividades- Y el término de la Ruta Cabrero -en donde los tiempos de viaje de los 72,3 km que unen a Concepción con Cabrero, se recorrerán en 45 minutos, media hora menos que antes.