Secciones

Consumir café en exceso implica riesgos para la salud

E-mail Compartir

El consumo de café es una costumbre para muchas personas y aunque quienes son amantes de este producto no se preocupan si es mañana o tarde, si es una calurosa tarde veraniega o una fría jornada invernal, es con las bajas temperaturas donde una calentita taza de esta bebida se transforma en aliada ideal para combatir el día a día.

De hecho, se estima que al menos el 30% de la población mundial consume una taza de café al menos una vez al día.

Ante este masivo consumo, se han abordado los beneficios de este producto, específicamente de su principal componente, la cafeína. "Una de las principales características de esta bebida es ser utilizada como estimulante, para poder conseguir una mejor concentración, ya que actúa sobre el sistema nervioso central. Otra de las características beneficiosas del café es su alto aporte de antioxidantes, los cuales podrían ayudan a evitar daños en la salud cardiovascular", cuenta Edmundo Rodríguez, docente de Nutrición y Dietética de la Universidad del Pacífico.

BONDADES Y PELIGROS

Eso sí, la relación que existe entre la cafeína y las enfermedades cardiovasculares aún no está clara, y así como existen estudios que aseguran que constituye un riesgo, hay otros que afirman lo contrario.

Al respecto, Rodríguez asevera que el café no puede ser consumido por todas las personas, en primer lugar, porque la cafeína es un activador del sistema nervioso central y causa vasoconstricción de las arterias, aumentando de manera significativa la presión arterial.

"Además, el café está contraindicado para personas que sufren problemas al estómago, ya que es un irritante de la mucosa gástrica y también deben evitarlo personas que sufren de insomnio, ya que al ser un estimulante produce problemas para conciliar el sueño", plantea el profesional.

¿Y LAS CALORÍAS

Considerando los posibles beneficios y también peligros que se pueden asociar al consumo de café, el académico dice que la clave está en la cantidad que se ingiere cada día.

Esto, pues, hay estudios que demuestran que consumir 300 ml de café al día (lo que equivale a una taza y media o un tazón), podría relacionarse con un efecto protector a la salud cardiovascular, plantea. "No obstante, un consumo de 600 ml al día puede aumentar los daños en nuestro cuerpo", advierte Rodríguez.

"Cuando una persona toma más café que el recomendado, se pueden producir los efectos de una intoxicación por cafeína, lo cual tiene síntomas como confusión, dificultad respiratoria, vértigo, aumento de la sed, orina aumentada, latidos cardiacos irregulares, temblores y además se pueden presentar malestares estomacales como dolor e inflamación gastrointestinal", cuenta.

Asimismo, añade, que un exceso de café a largo plazo puede aumentar los riesgos de sufrir hipertensión arterial y tener triglicéridos altos.

Otro punto en el que se detiene es en la cantidad de calorías, un aspecto que a muchos preocupa, sobre todo cuando quieren cuidar la línea. Sobre esto, dice que los distintos sabores y la leche que se utiliza determinan el aporte calórico, el que puede ir desde cero a 430 e incluso más. "El café casi no aporta calorías, no obstante al ser saborizados las aumenta. Hay que tomar en cuenta que cada cucharadita de azúcar suma 20 kilocalorías y al agregar leche u otros saborizantes, como crema o chocolate, las calorías van aumentando", concluye.