Aún no hay pistas de joven estudiante desaparecido hace 9 meses en Europa
Gladys Ramírez cada semana se dirige al Banco de Chile a ver si la cuenta bancaria de su hijo, Carlos Gallardo, tuvo movimiento. La razón es que cualquier acción que se realice sería clave para dar con el paradero del joven universitario de Cañete, que desde agosto de 2015 está extraviado en Europa.
Han pasado casi seis meses desde que la familia tuvo la última pista del estudiante de Fonoaudiología de la Universidad del Desarrollo, que realizaba una pasantía en la Universidad de La Coruña.
El último indicio fue en noviembre de 2015, cuando su madre y su hermana Marcela Gallardo, viajaron a Zurich, Austria, para indagar sobre su paradero. No obstante, tras ese momento no han tenido noticias nuevas, pese a que en las indagatorias de búsqueda la llevan las policías de Austria, de Alemania, además de la Interpol.
Marcela Gallardo incluso afirmó que no tienen nada nuevo a pesar de que contrataron detectives privados, que ya no siguen, y ofrecen una recompensa a las personas que tengan información del joven cañetino.
"Son mil francos suizos ($683 mil) que se están entregando a las personas que den información fidedigna y exacta a las policías", comentó la hermana del joven universitario. Esta medida fue adoptada por recomendación de la interpol.
ÚLTIMA PISTA
Fue en Olten, Suiza, cuando recibieron una serie de informaciones sobre el posible paradero del joven. Cerca de 10 personas lo habían visto en estaciones de trenes y vendiendo junto a otro joven postales navideñas en las calles.
Marcela Gallardo contó tras esos antecedentes se contactó con la policía de Zurich para ver esa arista. "Me contacté con ellos y accedieron de forma inmediata a las cámaras de seguridad de la estación de trenes que es donde lo habían visto. Se llevó a la persona que hizo la denuncia y se le mostró la grabación, pero el joven que había visto no era él", recordó.
La hermana de Carlos asume que han sido momentos duros pero que siguen con la esperanza de tener alguna pista del paradero del joven. Comentó que todas las semanas se informan de los pasos que realizan las policías y que ellos consultan si hubo movimiento en las cuentas bancarias.
"Ellos no pueden acceder porque son cuentas chilenas. Es por eso que mi mamá todas las semanas pasa al banco (de Chile) o la ejecutiva (del Banco Santander) le informa si hubo alguna novedad", declaró Gallardo, la que sostuvo que la búsqueda no se ha detenido y que las policías siguen trabajando en el caso.
Pero no sólo son las policías las que están abocadas en la búsqueda del estudiante de fonoaudología, también los ayudan las personas que los acogieron durante los 16 días que estuvieron en Europa buscando información.
TRANQUILIDAD
Hace unos días la madre de Carlos, Glady Ramírez, sostenía que "haremos todo lo que esté a nuestro alcance para volver a estar en él. No he perdido la esperanza de reecontrarme con Carlos".
Marcela comentó que los primeros meses fueron angustiantes, no saber que había pasado fue duro y doloroso. Ahora tras casi nueve meses el sentimiento es de tranquilidad, de tener fe de que su hermano en algún momento se va a comunicar con ellos
"La idea es estar lo más unidos posible para tratar de sobrellevarlo lo más tranquilamente, con la paciencia y la esperanza de que tengamos noticias pronto", expresó la hermana del joven universitario.
El viaje a Europa, en el sentido de ver qué estaban haciendo las policías suizas y alemanas fue vital para tranquilizarla a ella y, en especial, a su madre. Ver cómo trabajaban, cómo se organizaban y se traspasaban información entre ellas fue importante para la familia.
"Ellos no sólo tienen las huellas digitales de mi hermano, los registros dentales, sino que cuando estuvimos allá nos sacaron una muestra para tener el ADN de mi mamá y el mío. Ellos tienen un perfil completo", contó Marcela.
Es ante esta situación que tampoco tienen otro viaje programado a Europa. La joven expuso que si volvieran a viajar sería sólo por un antecedente concreto y fuerte del paradero del joven universitario.