Por más de 40 minutos un grupo de, al menos 30 comuneros mapuches, mantuvo bloqueada la ruta P-70 que une Cañete con Tirúa. El motivo fue la detención del presidente de la comunidad Kellgko, del sector San Ramón, Víctor Mariñán, por parte de la Policía de Investigaciones (PDI) .
Con una moto niveladora y otros implementos, los miembros de la comunidad impidieron que la policía civil arrestara al dirigente. Una de las situaciones que llevó a los comuneros a oponerse a la detención fue que, según ellos, los detectives no contaban con la orden correspondiente. Al lugar también llegó personal de Carabineros para controlar la situación.
El alcalde de Tirúa, Adolfo Millabur, quien llegó al lugar para informarse del hecho, comentó que había sido informado de la situación, especifícamente que Mariñán era detenido sin la orden respectiva y que les consultó a los detectives sobre ese punto, a lo que los funcionarios respondieron que no había un documento escrito, sino que sólo existía una orden verbal.
"Había mucha gente y llegamos a mediar. Lo extraño de todo esto es que el dirigente quedó libre, sin acusación de nada y tampoco hubo control de detención", declaró el jefe comunal de Tirúa, quien agregó que el allanamiento a la casa del presidente de la comunidad fue cerca de las 7 de la mañana y que el bloqueo de la ruta comenzó pasadas las 8.30, y que duró más de 40 minutos.
El alcalde comentó que toda la situación fue compleja, pero que tras mediar en la situación los ánimos bajaron. Sin embargo, volvió a insistir en que el problema fue a raíz de que no había un total conocimiento de parte de la comunidad de los motivos por los cuales se desarrollaba el procedimiento.
Cabe recordar que las comunidades han reclamado públicamente en contra de las policías por abuso de autoridad. Hace unos días el general director de Carabineros, Bruno Villalobos, salió al paso de estas críticas precisando que se trataban de procedimientos policiales normales y que de acuerdo a los antecedentes que tienen se ajustaban a derecho.
FISCALÍA
El Ministerio Público se refirió a lo ocurrido en la tarde de ayer en la ruta P-70. Lo primero que aclaró es que en el procedimiento realizado por la PDI existía una orden de entrada y registro emitido desde el Tribunal de Garantía de Cañete.
Además, la entidad persecutora precisó que la detención se realizó en el marco de una investigación por un delito de receptación.
También informó que "tomando en consideración lo que los funcionarios de la PDI que efectuaban el procedimiento informaban a la Fiscalía en cuanto al riesgo que había para la integridad física de los mismos funcionarios, del imputado y de la gente que estaba bloqueando la ruta se accediera a dejar citado al imputado, haciendo uso de las facultades que el fiscal (Juan Yáñez) tiene para ello, de acuerdo al código procesal penal".
Se accedió a esta situación y por lo tanto, Mariñán no pasó a control de detención ni fue formalizado por el delito que se le investiga, una situación que se dio debido a que el hecho tiene una pena baja y que Mariñán no tiene condenas anteriores.
Cabe precisar que el presidente de la comunidad Kellgko de San Ramón es investigado por el delito de receptación. Esto, debido a que en su propiedad se encontró un camión -grúa que a fines del año pasado había sido robado desde un camino interior de Tirúa, específicamente en el sector de Quidico.
Tras los hechos y la determinación del Ministerio Público, Mariñán, se presentó ayer en la Fiscalía de Cañete para reunirse con el persecutor penal. El dirigente, por el momento, sigue siendo investigado.