Aunque los problemas dentales son bastante comunes en grandes y chicos, muchos de ellos son bastante evitables y sólo requieren de hábitos positivos para la salud bucal. En especial cuando se trata de caries.
Magdalena Giuliano, jefe de la carrera de Higienista Dental de Santo Tomás Concepción, sostuvo que las caries se producen de igual forma en niños y adultos.
Lo anterior se debe a que restos de comida, principalmente azúcares, quedan en los dientes, sirviendo de alimento para las bacterias que se alojan normalmente en la boca.
"Al procesarlos, las bacterias eliminan a la cavidad bucal desechos ácidos tan fuertes que provocan pérdida de minerales de nuestros dientes. Esta pérdida es progresiva hasta tal punto de formar grandes cavidades en nuestros dientes, las caries", detalló.
Para evitar inconvenientes en los niños, es necesario que los padres insistan en darles a entender la importancia de no abandonar el cuidado bucal periódico, ya que esto podría acarrear infecciones y, por consiguiente, tratamientos futuros.
En este sentido, las odontopediatras de KidSmile, Pamela Bornscheuer y Gabriela Cancino, creadoras del programa Intervención Temprana Odontológica (I.T.O.) para impartir en Jardines, Colegios y Empresas, apuntaron que en Chile el 17% de los niños de 2 años ya tienen caries.
La mencionada cifra es seguida por un 48% los niños de 4 años; un 70% los de 6 años; y finalmente, un 62,5% los de 12 años.
Mamadera
La forma más económica y fácil de evitar la aparición de caries es mediante el cepillado dental habitual.
Esta acción debe efectuarse mínimo después de cada comida y especialmente antes de acostarse, de manera de evitar dormir con los dientes con residuos potencialmente cariogénicos.
Además, es relevante acudir al dentista regularmente, ya que estos profesionales son capaces de detectar las caries en sus primeras etapas, cuando aún no se han cavitado, por lo cual éstas podrán ser detenidas mediante procedimientos fáciles e indoloros como la aplicación de flúor tópico.
El caso también es complejo para los niños que aún se alimentan con mamaderas, ya que el uso prolongado y abusivo de estos artículos puede resultar devastador para la dentición de los niños, según consideró Giuliano.
"Primero su uso provoca una mala posición dental que afecta gravemente a la mordida. Y lo segundo es que facilita el desarrollo de caries por la mala utilización de esta: las mamás por comodidad dejan al niño con la mamadera durmiendo o se la dan como elemento tranquilizador, llenándola con jugos o bebidas", manifestó la docente.
Lo mencionado favorecería el periodo prolongado de permanencia de azúcares en la boca del niño, lo que sumado al hecho de que los dientes de los niños son más pequeños, resulta en una rápida progresión y avance de la caries.
Crear buenos hábitos
Enseñar con el ejemplo, es a juicio de Magdalena Giuliano, la base para que los más pequeños se acostumbren a mantener la higiene dental.
Para ello se debe hacer una rutina de lavado dentro de la actividades diarias.
"Hay que incorporar al niño en el proceso, que tenga su propio cepillo para cepillarse y luego el padre le realiza la técnica de cepillado correcta para limpiar correctamente", aconsejó la jefe de la carrera.
Otra acción que se debe considerar es tratar de ampliar el tiempo que se cepillan, que el niño no esté pegado al espejo cepillándose ya que es aburrido y lo hará por poco tiempo.
La profesional añadió que "la idea de esto es que los niños con su cepillo, sin pasta y sin agua, lean un libro, vean televisión o acompañen a sus padres. Estará mucho más tiempo realizando la acción de barrido de dientes, que es lo importante. Luego en el baño solo se cepilla unos minutos con pasta dental para obtener los beneficios del flúor y rico aliento a menta".
Pamela Bornscheuer y Gabriela Cancino, en tanto, junto con entregar diversos consejos (ver infografía), aseguraron que lo óptimo es mantener horarios de comidas y evitar comer a deshora.
"Una buena idea para incentivar y motivar a los niños a lavarse los dientes, es hacer un calendario donde el ellos puedan hacer una marca cada vez que realicen la acción, o tomar el tiempo, mínimo dos minutos, acompañado de la canción favorita del pequeño", agregaron.
Asimismo, se debe recordar que a partir de la primera aparición de un diente en la boca es importante llevar a los niños al odontopediatra, y los días que quedan de vacaciones pueden ser una buena instancia para realizar esta visita.