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Asipes valora vía institucional para perfeccionar Ley de Pesca

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El presidente de Asociación de Industriales Pesqueros Asipes, Luis Felipe Moncada, valoró la vía institucional que el Gobierno ha anunciado a través de una mesa de trabajo compuesta por parlamentarios de Gobierno y presidida por el Ministro de Economía, para analizar mejoras a la Ley de Pesca.

"Entendemos que la comisión propondrá una modificación de la Ley a través de un proyecto que se tramitaría por el Congreso, el que considerará también el análisis experto de la FAO. Nosotros valoramos esta vía frente a la inconstitucionalidad del proceso iniciado por el Partido Comunista", destacó el líder gremial.

Luis Felipe Moncada señaló también que "esperamos que esta mesa de trabajo sea integrada por parlamentarios vinculados a los temas pesqueros, de zonas donde exista actividad artesanal y también industrial y que se hayan aproximado permanentemente con imparcialidad frente a los temas de nuestro sector".

Asimismo, dijo que Asipes cree que el análisis debe sintonizar con el carácter proteccionista y patrimonial de la normativa y que tome en cuenta las experiencias a nivel mundial sobre las mejores prácticas de administración pesquera. Lo mismo con el informe de la FAO, que será un antecedente importante a considerar.

La preocupación del gremio pesquero de la zona centro sur es que esta comisión considere la relevancia de la actividad económica pesquera industrial como generadora de empleos permanentes y de calidad en las comunas donde opera.

"A nivel nacional son 36 mil puestos de trabajo y en la zona centro sur son otros 8.000 empleos directos, más 370 Pymes que ofrecen otros 3.000 empleos adicionales que deben ser resguardados por la legislación".

En ese sentido, Moncada dijo que en estos momentos existe el riesgo real que el sector pesquero industrial enfrente modificaciones profundas de las reglas del juego que han permitido inversiones y proyectos de crecimiento, debido al clima de desconfianza generalizada en el Parlamento.

Enfatizó que la expectativa es "que esa mesa sesione no sólo en Santiago, sino en Arica, Coquimbo, Talcahuano, Tomé, Coronel, Corral, Puerto Chacabuco, y los lugares donde estamos los pescadores y sus trabajadores".

Sorprende baja en tasa de desocupación regional

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El descenso para muchos inesperado, de la tasa de desocupación nacional en el último trimestre del año con el débil comportamiento de la actividad económica que imperó durante el 2015, sorprendió a varios.

Para los expertos las cifras se sostienen por la inercia de las grandes contrataciones del sector público en 2014, seguido por la construcción y la agricultura, este último sector con algunos matices.

La tasa de desempleo de la Región del Biobío se situó en 6,6% en el trimestre octubre-diciembre de 2015, cifra que presentó una baja de 1,1 puntos porcentuales respecto a la registrada en igual trimestre del año anterior y menor en 0,9 puntos porcentuales que el trimestre septiembre-noviembre de 2015, según informó el Instituto Nacional de Estadísticas, (INE).

La variación anual se debió a un leve incremento de la fuerza de trabajo sobre los ocupados y la baja de los desocupados.

En doce meses, los ocupados aumentaron 2,1%, mientras que la fuerza de trabajo se expandió en 0,9%; por su parte, los desocupados decrecieron 13,1%.

En el aumento trimestral de los ocupados de 1,4% incidió mayormente Agricultura y Ganadería con 11,7%, y Construcción 8,8%, mientras que la caída más acentuada se anotó en Industrias manufactureras (4,2%). Según categoría ocupacional, la mayor alza se observó en Asalariados (1,8%) y Empleadores (12,6%).

Para el PhD y director del departamento de Economía de la Universidad de Concepción, Claudio Parés, "efectivamente hay algo extraño en la caída del desempleo, pero creo tiene que ver con dos cuestiones fundamentales: la baja en la productividad que se discutió todo el 2015 y que, de hecho, hizo que el gobierno decretara el 2016 como "el año de la productividad", y segundo, al cambio en los sectores que emplean más gente, como la minería y el empleo doméstico, ya que se crearon mucho más cupos en hoteles y restaurantes y enseñanza, por ejemplo", explicó.

También aumentó la cantidad de gente que trabaja en jornadas parciales, especialmente aquellos que lo hacen de manera voluntaria, y, aunque la calidad de los contratos, tanto en formalidad como en duración, permanecen relativamente estables, todo indica que el mercado laboral chileno está cambiando, detalla Parés. "Probablemente vayamos a tener que esperar un buen tiempo más para acostumbrarnos a estos cambios porque está por verse el efecto que tendrá la Reforma Laboral en estos parámetros".

CONTRASTES

El desempleo bajó a un 6,2%

en 2015, a nivel nacional, pero también la tasa de presión laboral llegó a un 12,4%, es decir, la gente que buscó trabajo (considerando no solo a los que no tenían y buscaron sino también a aquellos que teniendo trabajo estaban insatisfechos) sigue siendo considerable.

En 2014 había un 13,2% de personas que trabajaban sin un contrato escrito y hoy esa cifra alcanza al 13,4%.

Quienes trabajan a plazo fijo alcanzan al 29,1% de los trabajadores desde 2014.

Francisco Klapp, investigador del Programa Económico de LyD, destaca que el empleo se ha mostrado bastante estable, "pese a que nuestra economía cumple ya dos años con un crecimiento decepcionante, aunque estamos lejos de una recesión como la de 2009 ó 1997-1998, periodos en los cuales las tasas de desempleo se dispararon por sobre los dos dígitos".

Para el economista, la tasa de desempleo, apuntalada por el crecimiento del empleo público a fines de 2014 y comienzos de 2015 y ayudada por la construcción -que aún muestra dinamismo en el área inmobiliaria anticipándose al alza de impuesto (ver página 8), con 44 mil nuevos empleos en 12 meses- se ha logrado mantener estable.

Advierte no obstante que el fenómeno ha sido acompañado de una tasa de participación estancada, producto de una Fuerza de Trabajo que crece más lento que en el pasado lo que se traduce en un aumento de los inactivos que debe ser monitoreado, además de salarios -tanto nominales como reales- expandiéndose mucho más lento.

"Si se piensa en el total de horas trabajadas en nuestra economía, este no mostró aumento alguno en 12 meses, puesto que sí bien la ocupación se expande, el promedio de horas trabajadas por cada persona cae en la misma proporción. Sin duda, un elemento que ilustra muy bien el poco dinamismo actual de nuestro país", detalla el economista.