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41% de los trabajadores chilenos asegura que no es feliz en su empleo

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¿Vivir para trabajar o trabajar para vivir? Es la reflexión que se hace hoy la gran mayoría a la hora de saber si están en el lugar correcto como trabajador, profesional o emprendedor. Pregunta clave también para definir si las empresas están llevando a cabo política de recursos humanos eficientes o erróneas.

Lo que sí es cierto es que un 41% de los trabajadores en Chile asegura que no es feliz en su organización, según el Estudio Nacional en el Trabajo, realizado este 2015 por JapiWorks y la Cámara de Chile (CNC), y dado a conocer durante un seminario realizado por Irade con empresarios asociados de la Región del Biobío, en Concepción.

Fueron 1.314 casos analizados a nivel nacional y regional. Mayores de 18 años, residentes en Santiago y en regiones, que trabajen en una organización de más de 5 empleados. La encuesta se hizo con un margen de error de un 2,75%.

Lo interesante de esta muestra es que el perfil de los trabajadores que no se siente feliz en sus espacios de trabajo, corresponde a la generación comprendida entre los 18-30 años de edad, mayoritariamente del sector femenino, ocupación directores, gerentes y profesionales, perteneciente al grupo socioeconómico ABC1 y de la Región Netropolitana.

Pamela Moraga, ingeniera civil industrial y una de las expositoras durante el seminario denominado "Organizaciones Exitosas y Saludables, comentó que las políticas que se crean al interior de las empresas "no están enfocadas en los trabajadores de hoy".

DESAFÍOS

"Es como las políticas antiguas, que se han estado renovando pero no satisfacen las necesidades de este nuevo tipo de generaciones. Ellos (los nuevos profesionales) buscan otra cosa. Su sentido va en un desarrollo integral, no sólo en la parte laboral como era en las generaciones anteriores sino que estamos hablando de personas que quieren un desarrollo integral y el trabajo es parte de ella", dijo Pamela Moraga.

Sostuvo que la "gente quiere poder desarrollarse familiarmente, socialmente, hacer deporte, y que el trabajo sea nexo entre su vida personal y su vida laboral; que fomente, que la empresa ojalá tenga convenios con gimnasios, que puedan ayudar a otras entidades. En fondo generar prácticas y políticas que resuelvan las necesidades de estas nuevas generaciones".

En tanto, el estudio reflejó que el 59% que sí se siente feliz en sus "pegas" corresponde al siguiente perfil: tramo etáreo comprendido a partir de los 55 años de edad, hombres, segmento C3 y D, están en la zona norte de Chile, y sus ocupaciones son oficiales, operarios y artesanos.

La expositora señaló que se trata sólo de abocarse a las condiciones de autorealización del trabajador, en la que se le motiva, se le reconoce o se generan políticas de reconocimiento, para eso las empresas -dijo Moraga- deben evaluarlo, generarle al empleado desafíos permanentes, con metas, indicadores concretos que permitan -a su vez- medir los resultados.

Patricia Contreras agente regional de Otic Sofofa, organizadores también de la actividad, afirmó que la felicidad organizacional viene surgiendo desde hace un tiempo en forma paulatina como una forma de mejorar el ambiente laboral en las organizaciones con vistas a obtener mejores resultados, disminución del ausentismo laboral, entre otros beneficios.

En tanto, Carla Boggioni, psicóloga, enfatizó durante la jornada que las claves pasan por no ser pesimistas. "No podemos ser pesimistas porque el mundo tiene tanta respuesta de vida, que finalmente nos conecta. Tiene que ver con qué realidad quiero mostrar. Logros, experiencias, metas", dijo.