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Hay personas que son más propensas al "Tecnoestrés"

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Cuando los computadores, teléfonos móviles y tablets comienzan a fallar, las personas tienden a estresarse y cambiar de humor. Este fenómeno se conoce como el estrés tecnológico o "tecnoestrés".

Sin embargo, el problema no lo tiene el aparato, sino la personalidad del usuario. En otras palabras, hay personas que son propensas a sufrir más por este tipo de percances.

Un estudio publicado por la revista Behaviour & Information Technology exploró en los factores que provocan el tecnoestrés. También estudiaron la relación entre cuatro rasgos fundamentales de la personalidad, los tipos de teléfonos y los niveles de estrés que experimentaron algunos usuarios.

rasgos detectados

El primer rasgo que detectaron los autores de la investigación fue el "locus de control", que definieron como "el grado en que las personas creen que sus acciones determinan sus recompensas en la vida".

Como el uso de los smartphones suele desordenar los límites entre el hogar y el trabajo, fomenta la multitarea y la comprobación constante de las notificaciones, los investigadores encontraron la génesis del tecnoestrés en estos aparatos.

"Esto se llama el 'ciclo útil estresante', en el que uno compra un teléfono inteligente para ayudar a administrar sólo la carga de trabajo que induce al estrés y se convierte en la pesadilla de nuestra existencia", observó el equipo, encabezado por Yu-Kang Lee, de la Universidad Sun Yat-sen de Taiwán.

El segundo rasgo se conoce como "ansiedad de interacción social". Las personas que padecen este trastorno tienen más probabilidades de depender de Internet y las redes sociales. También son propensos a sufrir los efectos secundarios negativos del uso excesivo debido al estrés causado por comprobar a cada rato las notificaciones del smartphone y estar siempre conectado.

El tercer rasgo es la "necesidad de contacto", que puede ser retribuida gracias a la rapidez e interacción con los mismos aparatos. Incluso, la pantalla touch suele ser más adictiva que el teléfono con teclado. Pero debido a este fenómeno, el simple hecho de tocar el teléfono tiene una estrecha relación con el tecnoestrés.

Finalmente, el último rasgo que se reconoce es el materialismo, el único que parece causar mayor estrés que los puntos anteriores. Esto ocurre cuando los usuarios cambian constantemente de teléfono cuando las compañías lanzan versiones nuevas.Entonces las personas llegan a un punto de tensión o "techo" en el que desean por todos los medios tener el teléfono más reciente del mercado, en función de sus deseos materiales propios. Pese a este hallazgo, los motivos aún no están del todo claros.

Estos rasgos de la personalidad pueden hacer que las personas sean más propensas a sufrir tecnoestrés. Su descubrimiento facilita a los profesionales de la salud a identificar y tratar a los usuarios que tienen este problema.

Este trabajo también aconseja disminuir el uso del teléfono móvil. La expresión extrema de esta dependencia es la nomofobia, que es el miedo irracional a salir de la casa sin el smartphone. Esto provoca aislamiento y niveles de estrés muy elevados.