Con barricadas protestan por operativo para erradicar comercio ilegal penquista
"Digan lo que digan vamos a seguir trabajando. Aunque sea con una bolsa o arrancando vamos a hacerlo". Así de tajante fue Maricel Monroy, una de las voceras de los comerciantes que trabajan de forma ilegal en calle Caupolicán de Concepción y que ayer se tomaron la vía por mas de media hora, en protesta por la acción que llevan las autoridades para erradicarlos del sector.
Cerca de las 6.30 horas personal de Carabineros, funcionarios de Sernapesca, del Servicio de Impuestos Internos, del municipio penquista y otras entidades realizaron el cuarto operativo, que se enmarca en el plan de erradicación del comercio ilegal en Concepción, cuyo piloto partió en Caupolicán.
No obstante, en esta ocasión, a diferencia de las anteriores, los trabajadores afectados con el decomiso de sus productos se manifestaron en contra de la medida impulsada por el alcalde Álvaro Ortiz y la gobernadora Andrea Muñoz.
Cabe consignar que la acción emprendida en contra de los comerciantes se debe a que no cuentan con permisos municipales, ni sanitarios para trabajar en el lugar. Además la incautación de los productos se debe a que se desconoce la procedencia de éstos.
MOLESTIA
Son más de 50 los puestos que se instalan de lunes a sábado en el sector, por lo que estiman que son más de 100 personas las afectadas directa e indirectamente, considerando a los vendedores y a quienes trabajan alrededor.
La molestia de la gente que trabaja en Caupolicán es que existe una mesa con las autoridades donde se está viendo el tema, por ello si bien reconocen que están trabajando de manera irregular, no entienden que los hayan ido a sacar.
"Se suponía que estábamos dialogando y hoy (ayer) nos encontramos con esto (...). Lo que siente la gente es que no hay un respaldo sincero. Sabemos que estamos irregular, pero toda la vida ha sido así", expresó Monroy. Agregó que existe la disponibilidad de formalizar sus negocios y ubicarse en un espacio que les acomode, pero que para eso necesitan generar recursos.
Durante el cuarto operativo realizado, los comerciantes sostuvieron que les incautaron más de 50 cajas de pescado, cada una de las cuales puede costar hasta $25 mil.
Fernanda González, también vocera del grupo que ayer se manifestó, contó que perdió un capital de $350 mil por el decomiso de pescado que le hicieron.
González, además, declaró que las autoridades les dicen que formalicen sus negocios y que se trasladen a otro lugar, pero no pueden hacerlo si no generan dinero: "Queremos que nos dejen trabajar por mientras tenemos el diálogo de si podemos arrendar el terreno que estamos viendo, pero el tema es ¿con qué vamos a pagar?".
Contó que uno de los sitios que están viendo es el de la familia Repetto en Caupolicán, esquina Los Carrera, el que en un primer momento se gestionó para el mercado provisorio.
EN LA CALLE NO PUEDEN
La manifestación fue resuelta por Carabineros, que dialogó con los vendedores. Luego, las autoridades hicieron la evaluación del plan que se inició oficialmente el 5 de agosto (ver infografía).
La gobernadora Andrea Muñoz declaró que entiende que este proceso de 6 meses será complejo y que situaciones como esta se podrán repetir. No obstante, fue enfática en decir que ya se tomó la decisión de frenar el comercio ilegal.
"Hemos reiterado en diversas ocasiones que la venta ilegal en la calles de Concepción es una situación que no vamos a tolerar, es una falta que afecta a la ciudadanía (...). La invitación a cada uno de ellos ha sido siempre a que formalicen su actividad, a que la desarrollen como lo hace el comercio establecido", declaró.
Con respecto al retiro de los productos y que no se les permitiera trabajar en el lugar, tanto la gobernadora como el alcalde Ortiz plantearon que se debió a que los comerciantes no cumplieron compromisos que se habían adoptado, como el de no trabajar en el sector.
Ortiz dijo que en la última reunión sostenida las voceras les solicitaron que los dejaran trabajar con normalidad el sábado y el lunes, ya que habían adquirido la mercadería y no querían que se perdiera, y que a partir del martes ya no estarían en el lugar, lo que no ocurrió.
La gobernadora agregó que "estamos haciendo lo que está en el marco de nuestras competencia y funciones".