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Fuerte aumento del pesimismo reveló Indice de Confianza en la Economía

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Un 36% de los 580 encuestados que consultó el undécimo Índice de Confianza en la Economía Regional, Icer, que elabora la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad San Sebastián (USS), considera que la actual situación económica de la Región del Biobío es mala, mientras que sólo un 10% la cataloga como buena.

Al comparar las cifras de este estudio, que se elabora desde septiembre de 2011, con las arrojadas por el mismo informe un año atrás, se aprecia un importante aumento del pesimismo en los consultados en el Gran Concepción, Los Ángeles y Chillán, percepción negativa que se agudiza en las últimas dos ciudades.

En el primer semestre de 2014 un 24% consideraba que la situación de la región era mala, porcentaje que se elevó a un 36% en esta última medición, cifra sólo comparable con la percepción negativa que arrojó el informe en septiembre de 2011 cuando un 38% opinaba que la situación de Biobío era mala.

En cuanto a la economía a nivel país, un 39% afirma que es mala, solamente un 9% plantea que es buena y el restante 52% dice que es regular. Esta visión pesimista se debe a que "las cifras de crecimiento en el país siguen muy bajas y al nefasto contexto político actual" de acuerdo a la visión de Pablo Neudörfer Retamal, académico de Ingeniería Comercial de la Universidad San Sebastián.

confianza en el futuro

Agrega que, a pesar de la visión negativa de la situación, los consultados prevén una mejoría futura. Es así que uno de cada tres consultados cree que la situación del país en dos años más será mejor y uno de cada cuatro considera que será peor. Un 43% opina que no variará.

Frente a escenarios de inestabilidad y pesimismo, la población tiende a disminuir el endeudamiento para comprar bienes durables. De esta forma, un 55% considera que es un mal momento para adquirir un automóvil o una vivienda. Sólo un 18% dice que es un buen momento. Un 67% advierte que es un mal momento para solicitar un crédito bancario.

Al relacionar esas cifras con el número de personas que piensa que hoy es difícil hallar empleo se puede obtener una visión del alto nivel de pesimismo que tiene la población en la Región del Biob´´io. Un 77% dice que encontrar trabajo es muy difícil, sólo un 2% opina que es fácil y un 21%, que es normal. La percepción de que es complejo encontrar trabajo es más alta en el Gran Concepción (80%), en comparación a Chillán (77%) y Los Ángeles (71%).

Pablo Neudörfer, comenta que esta percepción está anclada en el pobre desempeño actual de la economía. Sin embargo, llama la atención que esta expectativa pesimista no se corresponda con las cifras de desocupación. Estas últimas no han sido todo lo negativas que se esperaba que fueran.

ADULTOS MAYORES

Al igual que en todas las versiones anteriores, el informe incluyó preguntas sobre otros aspectos. En esta oportunidad, se les consultó a los encuestados en qué áreas debería el país poner énfasis para enfrentar la situación de los adultos mayores. De todas las opciones propuestas, los consultados respondieron que Salud y Pensiones son por lejos las áreas a las que se debe otorgar prioridad.

Pablo Neudörfer indica que aquello es esperable, ya que los adultos mayores, a diferencia de los más jóvenes, son conscientes del elevado gasto en Salud y de la falta de recursos para poder cubrir estos gastos considerando las bajas pensiones.

"Lamentablemente, en muchos casos ya es carrera corrida y son los jóvenes los llamados a prepararse para la etapa de jubilación. Por otra parte, es el Estado es el que debe ayudar a estos jubilados en condición precaria o en riesgo de caer en precariedad", puntualiza el economista.

DESCONFIANZA

ciudanana

El estudio también consideró preguntas sobre los casos de corrupción y su impacto.

El 97% de los entrevistados señala que los casos de corrupción son fuente de desconfianza en la economía y apuntan a los políticos como los mayores responsables. Sin embargo, sólo el 8% de ellos declara que esta desconfianza se explica por la falta de compromiso cívico de la población y su efecto en la sociedad.

"Es preocupante que un porcentaje tan menor sienta que la calidad de nuestras instituciones y la falta de capacidad para evitar la corrupción sean un reflejo de nuestra falta de compromiso como ciudadanos. Sin duda, los políticos son el reflejo de nuestra sociedad y si no internalizamos que las instituciones se construyen desde abajo hacia arriba, partiendo por la junta de vecinos, es difícil que se genere un cambio a nivel general. Es cierto que las malas prácticas de los políticos y grandes empresarios tienen un mayor efecto, no obstante, debemos preguntarnos qué prácticas tenemos cada uno de nosotros como ciudadanos. Probablemente la respuesta no sería muy positiva", reflexiona Neudörfer.