El Estado Islámico invade la ciudad iraquí de Ramadi
Combatientes del Estado Islámico (EI) invadieron ayer la ciudad iraquí de Ramadi, donde tomaron el último bastión gubernamental, informaron fuentes militares.
Los yihadistas tomaron el distrito de Malaab, en el sur de la ciudad, dos días después de haber logrado el control sobre casi toda la ciudad, situada a unos 110 kilómetros al oeste de Bagdad.
La emisora Al Arabiya dijo que Ramadi se encuentra ahora "totalmente controlada" por los yihadistas. El canal emitió imágenes que presuntamente muestran a fuerzas iraquíes huyendo de la ciudad.
Ramadi es la capital de la provincia de Al Anbar, la más importante del país, que se extiende desde la capital, Bagdad, hasta la frontera con Siria. La mayoría de su población es sunita.
"Daesh (acrónimo árabe del EI) logró tomar el control sobre Malaab, considerada el último bastión de las fuerzas de seguridad en Ramadi, luego de enviar cientos de sus combatientes a ese distrito", dijo a DPA una fuente militar que pidió permanecer en el anonimato.
El Gobierno iraquí informó que enviará a combatientes chiitas aliados y el primer ministro, Haider al Abadi, ordenó a los paramilitares que "estén preparados" para combatir a los yihadistas, según Al Irakiya.
El éxito de los islamistas en Ramadi no ha podido ser replicado en la histórica ciudad de Palmira, declarada Patrimonio de la Humanidad. Porque ayer los yihadistas fueron expulsados por las fuerzas sirias hacia la periferia de esa ciudad.
Después de cruentos combates con el Ejército sirio, el EI "se retiró de la mayoría de los barrios" del norte de la ciudad, a un día de haber tomado esa zona, dijo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Los insurgentes rodean prácticamente toda la ciudad y están a un kilómetro del sitio arqueológico de Palmira, declarado patrimonio.