No sólo lindas y señoritas
Continúa siendo tema la inequidad de género y de la discriminación hacia la mujer. Los Estados siguen trabajando en pos de crear las condiciones en la sociedad que garanticen la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres e instalar un enfoque de género en las políticas públicas. Los movimientos feministas siguen en la lucha por la participación femenina e igualdad de derechos.
En nuestras familias la inequidad también se hace presente, ya que somos nosotros y nosotras los y las que seguimos construyendo el "ser mujer" desde los estereotipos de género, en donde esperamos deliberados comportamientos y otorgamos determinadas características a las mujeres, por cierto, distintas a las de los hombres. Estos estereotipos son construidos por la sociedad y permanecen vigentes gracias a nuestra cultura que nos dice que existen rasgos que son considerados intrínsecos de la condición femenina. Vamos enseñando a los hijos e hijas a "ser" niños y niñas, según las pautas culturales del sistema sexo-género, que determinará los espacios y los límites de la inclusión social de cada uno y cada una.
Madres y padres hablamos de nuestras hijas desde calificativos asociados a la belleza, la simpatía o desde sus habilidades artísticas ("ella baila y/o canta lindo") sin darle valor a lo cognitivo y/o racional. No abogo por la arcaica concepción de que las "mateas" carecen de belleza y/o simpatía, eso sí que sería machista, ya que no son cualidades excluyentes de modo alguno, sin embargo lo que resulta curioso, es lo reduccionista de los calificativos que ocupamos con las niñitas, que finalmente redunda en perpetuar las ideas preconcebidas de lo que es ser mujer. Los estereotipos asociados a "lo femenino" nos determinan a lo largo de nuestra vida. Si la niñita se comporta desordenada, poco delicada, desconcentrada y/o alborotada, me preocupa que de adulta sea calificada de "amachada, suelta y/o loca".
El cambio cultural debe empezar por casa, por ello, no limitemos a declarar que nuestras niñitas son "lindas y señoritas", intentemos ver que hay más allá de las princesas y del color rosa.
Carmen Gloria Carvajal
del Despósito
Directora de Área Carreras Ciencias Sociales Santo
Tomás Chillán