Sectores productivos ven con optimismo el futuro con un fuerte desarrollo de la Región del Biobío
Sin duda que los sectores productivos de la Región del Biobío son claves para el desarrollo y, por ende, del crecimiento.
Sin embargo, hace cinco años eso quedó muy débil al principio. Sectores como el pesquero resultaron sumamente dañados no solo con la destrucción de plantas procesadoras, sino que también por los saqueos.
Hoy ese sector, gracias a fusiones y reforzamiento de otras unidades está en buen pie.
Lo mismo ocurrió en el sector construcción, donde incluso hubo judialización de casos por caída de edificios que costó pérdida de vidas humanas. Actualmente, pese a la caída en ventas de casas y departamentos, el área goza de un buen momento.
Durante cinco años, se ha visto como el sector ha llevado adelante proyectos inmobiliarios, de carreteras y un sinfín de iniciativas que han levantado, sobre todo, al Gran Concepción, que ha visto un impulso inmobiliario impresionante.
El comercio, que genera un alto número de empleos con contrato para sus trabajadores, también ha tenido prácticamente que subsistir en este lustro.
Las pérdidas generadas a este sector ese 27 de febrero obligó a muchos a bajar las cortinas, aunque otros se levantaron y siguieron adelante.
Eso sí, son muchos los obstáculos aparecidos en el camino, como la lucha contra el comercio ambulante, aplicación de nuevos impuestos, regulaciones, que consideran, frenan el crecimiento. Eso, sumado a la irrupción de productos provenientes de afuera y la arremetida de comerciantes extranjeros, en particular de Asia, que llegan con precio mucho más bajos.
Por ahora, solo esperan el apoyo de las autoridades para seguir luchando y generar empleo.
Una de las áreas golpeadas fue la forestal, la cual no solo sufrió el golpe del megasismo de hace cinco años. Ese fue considerado como el segundo quiebre, pues el primero había sido la crisis subprime de 2008, que incluso obligó a cerrar empresas en la Región.
Hoy, esa importante área productiva para el Biobío vive momentos buenos, con exportaciones a nuevos mercados e innovando constantemente.
El empresariado está optimista luego del megasismo. La Región presenta índices de crecimiento importantes, pero que consideranque no hay que dormirse. Hay que seguir potenciando a la zona, sobre todo en lo referente a la conexión vial, clave para el desarrollo sostenido.
Esto fue lo más fracturado con el terremoto y maremoto. La infraestructura hoy está mejor, pero aún falta mucho.