Finalmente, el 26 de enero se aprobó en todas sus instancias la ley que busca terminar con el lucro, selección y copago, pese a la negativa de gran parte de la Alianza en el Congreso. Tras la noticia, el seremi de Educación, Sergio Camus, realizó una actividad junto a la Junji para difundir las buenas nuevas en la educación, donde señaló que no existirá calidad sin "inclusión".
El ministerio, anticipando lo que ocurriría para 2016, cuando la normativa comience a aplicarse, invitó a los 7 liceos bicentenario de la Región a adelantarse a esta Ley de Inclusión que termina con la discriminación, entre otros. "La mayoría de ellos accedió a eliminar la selección vía notas y permitir el acceso de la matrícula directamente", cuenta el seremi.
Anticipados
Establecimientos que se gestaron en la administración de Sebastián Piñera y que hoy, con la aprobación de la ley -que entre otras cosas pondrá fin a la selección- podrían modificar su metodología y resultados.
Por lo menos es lo que en parte cree la directora del Liceo Bicentenario de Coronel, Fanny Gutiérrez, quien considera que ante estas medidas se "podría afectar (la calidad) a largo plazo".
Asimismo, espera que ojalá estos modelos de establecimientos se repliquen en otros liceos y sean realmente una alternativa, aunque considera que "con los cambios y las reformas no se apunta en absoluto a la calidad de la educación (...). Es complicado el tema, creo que a corto plazo no nos afecta, pero tal vez a largo plazo sí".
Una visión más inclusiva es la del Liceo Bicentenario Marta Brunet Cáraves de Chillán, donde su director, Ricardo Pérez, destaca que no se realizan pruebas de selección como tal, ya que tienen más oferta que demanda al tener desde 2014 una infraestructura mucho mayor. Esto permitiría que una de las pocas medidas frente a los estudiantes nuevos sea una conversación con los padres de los varones para que sepan el trato que deben tener hacia las mujeres, ya que sólo hace tres años el liceo es mixto.
Pérez aclara que se realiza un nivelamiento, porque exigen un 70% de rendimiento según la malla curricular. Insiste en que "los profesores del sistema municipal se esfuerzan más que los del particular, porque tenemos una mayor diversidad de alumnos y sin el 100% de apoyo del apoderado. Y siempre sacamos buenos resultados", sostiene Ricardo Pérez.
También destaca que en el Simce pasado sacaron el tercer lugar, superando al tradicional Colegio Padre Hurtado y quedando sólo bajo el Colegio Alemán y el Concepción de Chillán. Finalmente, y respecto de la reforma que ya comienza a gestarse firmemente, el director manifiesta que no lo ve negativamente, ya que cree en la inclusión y en el trabajo docente, pero espera una mayor inversión en tecnología, pues la considera una herramienta válida y motivacional que funciona.
INCLUSIÓN Y RESULTADOS
Otro de los bicentenario que podría ser un ejemplo de lo que busca la reforma educativa es el Liceo Bicentenario de Excelencia Polivalente San Nicolás, siendo uno de los primeros en firmar el compromiso para que a la promoción 2015 entraran los niños a través de del sistema de la tómbola (30%) y el 70% rindiendo exámenes de admisión, como contó su director, Víctor Reyes.
Agrega que para los alumnos nuevos de 1º medio que no son de San Nicolás, se les aplicó una prueba de selección, no así a los provenientes de la comuna, quienes igualmente participan del proceso, pero no se excluyen.
Reyes indica respecto a la inclusión que destaca el Modelo Pedagógico de Trabajo, que "consiste en trabajar con los niños a través de niveles de aprendizaje. Ningún niño es sometido a un ritmo que no lo hace superarse a sí mismo". Un punto muy importante, y que demuestra que si bien existe un porcentaje de selección, más del 80% de sus alumnos provienen de situación vulnerable con padres que muchas veces no superan en promedio la escolaridad de 6º básico.
El establecimiento, que este año tuvo un acceso a la PSU de un 86% de sus alumnos, quiere transformarse en el Instituto Nacional de la Región.
Finalmente, y con todos sus resultados a cuestas, el Liceo Bicentenario de San Nicolás busca "apoyar el tema de la reforma. Esperamos que cuando la ley esté en vigencia, todos los alumnos dejen de rendir pruebas de selección. En nuestro caso, por ser colegio público, no estábamos acostumbrados a seleccionar, pero nos vimos obligados porque la demanda supera la oferta. Pero creemos que con el sistema de niveles, en ningún caso bajaremos los aprendizajes, porque el haber trabajado en la diversidad casi 4 años antes de lo que se propone hoy nos permite tener mucha experiencia en el tema".