Una importante oportunidad de realizar nuevos negocios encontraron 18 empresas del sector forestal maderero, de las cuales 13 son de la Región del Bío Bío, en un encuentro que reunió a esos exportadores chilenos con 32 compradores y potenciales clientes del producto forestal de Centroamérica y el Caribe.

La actividad, organizada por la Oficina Comercial de ProChile en Costa Rica y el Departamento Industrias de ProChile, se enmarca en el interés de Costa Rica y de otros países de Centroamérica y el Caribe por la construcción en madera, especialmente de vivienda social, que les permita revertir el déficit que tienen. Se trata de una alternativa que les permitiría entregar una solución habitacional a las familias y que tiene varias ventajas, incluyendo un menor tiempo de construcción y un menor impacto ambiental.

El Encuentro Empresarial Maderero Chile-América Central y El Caribe se inició con el seminario 'Uso de la madera en construcción: innovación y sustentabilidad', con un asistencia de 130 personas. Participaron como expositores Fernando Rosselot, director nacional del Instituto Forestal de Chile (Infor), Gonzalo Hernández, del Infor en Bío Bío y el arquitecto Martín Hurtado. De Costa Rica participaron con sus ponencias Freddy Muñoz y Diego Camacho, del Instituto Tecnológico de Costa Rica, y el arquitecto Adrián Coto.

Luego, se llevaron a cabo cerca de 500 ruedas de negocios con la participación de los empresarios chilenos e importadores, logrando materializar negocios por más de US$1 millón.

Entre las empresas chilenas participantes se encuentran Masonite, Noramco, Forestal Alto Horizonte, Forestal Bagaro, Forestal DyF, Maderas Río Colorado, Forestal Colcura, además de empresas miembros de la Asociación Gremial de Pequeños y Medianos Industriales de la Madera, Pymemad.

Innovación y sustentabilidad

Para satisfacer la demanda de madera, tanto para desarrollos inmobiliarios como para la venta al detalle en tiendas, almacenes, depósito de materiales y ferreterías, Costa Rica ha incrementado las importaciones de madera chilena en los últimos años: pasó de comprar $58 millones en el 2012 a $60 millones el año pasado, con un crecimiento del 2%.

"Las importaciones de madera que realiza Costa Rica representan para Chile el 56% del total de las ventas de este producto hacia Centroamérica y El Caribe. En general, Chile es el principal proveedor de productos forestales en la región, gracias a que posee 2,96 millones de hectáreas de plantaciones forestales y un consumo anual de trozas destinadas a la producción de madera de 19,3 millones de metros cúbicos sin corteza (m3 ssc), que terminan en madera aserrada, tableros y paneles", detalló la directora de ProChile en Costa Rica, Marcela Aravena.

En términos generales, los mercados centroamericanos y caribeños mantienen a Chile como uno de sus principales proveedores. Países como El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá muestran crecimientos importantes en el ritmo de sus importaciones.

Además, el tratado de libre comercio firmado entre todos estos países en 1999 -que en el caso de Costa Rica entró en vigencia en el 2002- ha propiciado un mayor dinamismo para los productos forestales, gracias a la reducción arancelaria, mayores flujos de exportaciones, mejores costos de acceso y aspectos logísticos.

"Una de las características que posee la madera proveniente de Chile (pino radiata) es su alto rendimiento por hectárea. Esto se debe a factores asociados con el clima y el tipo de suelo que se da en este país, que aseguran la calidad de todos los bienes que se producen allí", agregó Aravena.

La directora regional de ProChile Bío Bío, Sandra Ibáñez, destacó que la importante presencia de empresarios regionales en este encuentro internacional: "es una muestra del dinamismo que están adquiriendo las pequeñas y medianas empresas de la madera en el negocio forestal, que están incorporando valor a nuestra materia prima, que es principalmente pino radiata".

En el caso de las Pymes madereras del Bío Bío, Sandra Ibáñez valoró que poseen una larga experiencia en el diseño y elaboración de casas prefabricadas de madera, así como de partes y piezas de madera para la construcción, incluyendo puertas, ventanas y revestimientos, por lo que están en condiciones de ofrecer productos muy atractivos y convenientes para el resto de los mercado de Latinoamérica.