Mientras la producción manufacturera se recuperó notablemente en septiembre a nivel país, experimentando un fuerte salto de 5%, en la Región del Bío Bío hubo una caída de 1,3% de la producción industrial. Esta cifra entregada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) se debe a que cinco de las nueve divisiones que conforman el indicador anotaron un nivel de producción inferior al registrado hace doce meses.
Carlos Smith Clavería, director de Ingeniería (E) en Administración de la Universidad del Desarrollo, dijo que claramente se puede apreciar que la contracción de la demanda en general lleva a que se requiera menos energía para poder producir a nivel mundial (parte del por qué de la baja en el precio del petróleo también). Esto ha sido más acentuado en Chile y la tendencia debiera ser a la baja en los próximos meses, por lo que la refinación (Enap) podría también golpear a la Región.
Además "tenemos el problema del precio del hierro en el mundo que ha llevado a la CAP a estar en una situación complicada de ajustes en la inversión y la producción. En el proceso de producción de hierro se utiliza el coque, por lo que la demanda ha disminuido bastante".
La celulosa tiró el carro hacia adelante debido a mejores precios respecto al año anterior y los meses pasados, sin embargo para el futuro es mas incierto el panorama dada la entrada en operación de proyectos, especialmente en fibra corta, a nivel mundial, donde Chile aporta con algunos de ellos, que podrían llevar a un sobre stock de celulosa, derivando en menores precios.
Las divisiones de mayor incidencia negativa en la producción manufacturera regional fueron Fabricación de metales comunes, Fabricación de productos elaborados de metal y Fabricación de coque, productos de la refinación del petróleo y combustible nuclear. Estas actividades influyeron en 4,943 puntos porcentuales en el indicador.
INDUSTRIA
El director de Corbiobío, Jorge Porter, consideró que "nos hemos estado desindustrializando por años, en industrias importantes que dieron trabajo a muchas pymes y esa desindustrialización no ha sido reemplazada por otras fuentes de trabajo, en la misma magnitud".
Hubo un aumento en el retail y la construcción, que están pasando; algo aumenta la generación de energía que se usa finalmente en Santiago, la pesca que es estacional. Además, el Estado no paga oportunamente lo que debiera cancelar en varios sectores, lo que afecta al consumo y a la inversión.
La inversión pública, en infraestructura que se necesita, puede paliar en algo la baja actividad, pero es el sector privado el que finalmente lo hará, pero cuando haya incentivos reales y se termine la incertidumbre en que estamos.
TRANSFORMACIÓN
Renato Segura Domínguez, director de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad San Sebastián, dijo que la caída de la producción manufacturera en la Región y el desacople con el país, se explica al menos por dos elementos de suyo relevantes: el proceso de desindustrialización de la economía regional que se hace evidente a partir del cierre de las minas de carbón y que persiste hasta nuestros días, y la consolidación de la industria de la madera y la celulosa y las inversiones cuánticas que caracterizan al sector, cuya proyección se reduce al proyecto Mapa de Arauco (ampliación de la planta), sin que exista en el horizonte nuevos proyectos de importancia.
Alberto Miranda, presidente de la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción, indicó que la industria regional, tal como se ha manifestado hace un tiempo, está viviendo un periodo de transformación productiva.
"Las principales causas tienen relación con la pérdida de competitividad, dado factores como precio de energía eléctrica, caída de la productividad, infraestructura vial deficitaria, ingreso de productos de menor valor, entre otros. Sin embargo, reiteramos que otros sectores están creciendo, como la agroindustria y los servicios. Cabe resaltar que el PIB regional no ha caído desde el año 2011, sino que se ha mantenido en cifras levemente positivas, pero lo que realmente necesita la Región para tener un crecimiento significativo es el impulso fuerte a la inversión, tanto pública como privada".