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"Escenario íntimo 2": el registro necesario de una impronta musical

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Con la masificación de la fotografía y redes sociales que permiten tener cientos de imágenes distintas como perfil, resulta cada vez más necesario recordar la finalidad y los alcances del arte del retrato. Durante siglos fue la única manera que tenían los personajes relevantes o más acaudalados de permanecer en la retina de las nuevas generaciones, pero también eran el reflejo de una época o de la propia vida del retratado, incluyendo elementos que representan su linaje o su oficio (en el Renacimiento está el emblemático ejemplo de Holbein).

Pese a los nuevos tiempos, aquella valoración del registro como constatación de un devenir histórico no ha perdido su impronta; generando una diferenciación entre el retrato individual con intención artística y aquel que apela a la funcionalidad, a dar cuenta de un fenómeno como parte de una serie. En nuestra ciudad ya se ha hablado hasta la saciedad de una impronta musical, pero ello no había sido plasmado en un ejercicio de este tipo hasta que surgió el proyecto "Escenario Íntimo" de la fotógrafa Angélica Paredes.

La primera serie realizada hace un par de años resultó valorada tanto por el público como por los propios artistas; pero Angélica pronto descubrió que si se trata de un archivo realmente representativo el proyecto debía continuar. Hizo caso a los nombres que según muchos faltaban, así como la consideración de un mayor abanico de estilos y géneros musicales. Desde la semana pasada ese cometido se cumple con "Escenario Íntimo 2", muestra con 46 nuevos retratos que se puede visitar en la multisala de la Alianza Francesa, y que al igual que su precedente, incorpora un libro en pequeño formato.

Retornando a la idea de la constatación de un fenómeno o movimiento, el resultado de ambas experiencias resulta cambiante y orgánico; incluso vemos como de distintas agrupaciones ahora surgen nuevos proyectos o se incorporan otros nombres a la escena. También se notan avances en la producción de las imágenes, ya sea en el vestuario, las poses o en la inclusión de instrumentos y elementos propios de cada estilo, potenciando así el aspecto descriptivo y conceptual del retrato.

Otra novedad muy oportuna es la incorporación de reseñas en cada foto, permitiendo profundizar en la función de archivo que cumple "Escenario Íntimo 2". En el nuevo libro además se incorporan imágenes de los artistas en vivo; un aporte no menor, pues constata la labor en terreno de la fotógrafa. No era sólo citar a bandas y solistas a una sesión, la artista escuchó y presenció sus actuaciones, justificando de este modo el criterio de selección en el que además participó el productor Mauricio Melo.

El espectro estilístico va desde el folclore a la electrónica, pasando por bandas promisorias emergentes como Mutakxsis hasta leyendas como Cecilia o figuras de culto como Daniel Campos. De ese modo, la nueva serie no hace más que hacer justicia a nuestra diversidad sonora.

El resultado es satisfactorio, pero es probable que surjan nuevas exigencias y posibilidades para el futuro. Una de ellas tiene que ver con unir ambas series en pro de un resultado completo y necesario. También es seguro que vayan surgiendo nuevos nombres que quedaron en el tintero o proyectos que por ahora están en pañales. En ese sentido "Escenario Íntimo" es como un niño que tiene mucho por crecer, cambiar y fluir al son de nuestra música.