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Reformas y empleo

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Recién promulgada la reforma tributaria y aún discutiéndose la reforma educacional, ya se alista la laboral. Esto se asemeja a un juego de cartas, "tu reforma y otra más" y parece ser que la premura, además de la cantidad, no ha dado tiempo suficiente a los legisladores, agentes y partes involucradas e interesadas directamente, para realizar un trabajo que redunde en tener mejores leyes, en una serie de importantes áreas.

Sin duda, debe preocupar la calidad de las reformas antes que la cantidad y la velocidad para aprobarlas.

En cuanto a la reforma laboral, que ya está "en puerta" para ser enviada al Congreso, ha surgido una serie de cuestionamientos, como es la existencia de información parcial sobre el proyecto, dudas sobre algunos objetivos, o el rol que tendrá en el futuro "la fuerza sindical", o la incertidumbre respecto de sus efectos sobre el nivel de empleo que pueda causar, lo que la hace aparecer como un potencial "ajuste de cuentas", en vez de una verdadera reforma.

Sin lugar a dudas, el momento en que se discutirá el conjunto de normas citadas no es el más indicado, por una serie de factores: indicadores económicos que han ido en detrimento, sentido contrario a lo que se había proyectado para el presente año, como es el caso del crecimiento económico, desempleo, inflación, etc. ,lo cual ha creado expectativas negativas, haciendo bajar la confianza de los inversionistas, empleadores y consumidores en el futuro, aunque las autoridades del sector económico tibiamente tratan de informar que vendrán tiempos mejores el próximo año.

Lo que sería deseable en una reforma laboral, es aquello que existe en economías más desarrollados, donde en estos temas no hay una confrontación sino más bien un diálogo abierto y franco, que va en busca de llegar a acuerdos sobre leyes laborales justas y equitativas para todos los involucrados, empresarios, empleadores y trabajadores, más que imposiciones y reformas forzadas, donde los cambios tienen un respaldo amplio y no son el producto de pasar la "retroexcavadora".

En la reforma laboral próximamente serán analizados y discutidos diferentes temas, como los relacionados con la flexibilización de determinadas normas o aquellos que tienen que ver con el contrato de trabajo para jóvenes, o disposiciones que estarían en línea con el fortalecimiento del movimiento sindical, por citar algunos de ellos, pero cualquiera que sean estos, se debería cuidar y garantizar que las nuevas normas no lleven implícitos otros objetivos y consecuencias que causen obstrucción al crecimiento y desarrollo económico inclusivo del país y que se agregue, además, un indeseable aumento del desempleo.

Tobillera electrónica

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A mediados de septiembre, se puso en marcha el Sistema de Monitoreo Telemático de reos, que puede ser una tobillera o un brazalete electrónico. Fue en Arica donde se dio el primer paso. Hasta el momento, se han instalado bandas en los tobillos de personas condenadas por distintos delitos tanto en nuestra Región del Bío Bío, como las regiones de Arica y Parinacota, Valparaíso y Antofagasta.

El primer caso en nuestra zona correspondió a un reo de Chillán, pero hay pendientes 219 solicitudes. El sistema es considerado para personas que infrinjan la ley de drogas, manejo en estado de ebriedad, delitos contra la propiedad, amenaza intrafamiliar y lesiones.

El más reciente, se fijó a un joven de 19 años que recibió una condena de 541 días de presidio, en Antofagasta. Se optó por la reclusión domiciliaria nocturna, la que se será vigilada mediante el monitoreo telemático. El sistema se activa mientras la persona se encuentra, en este caso, en su domicilio y envía una señal que es seguida por Gendarmería.

El uso de este tipo de dispositivos electrónicos está recién comenzando en el país y evidentemente, está sujeto también a una constante revisión. Por sus características, puede ser útil en diversas circunstancias. Por ejemplo, podría ser un sistema de similares características que se aplique respecto a las órdenes de alejamiento y para protección a víctimas, lo que tiene también sus complejidades propias.

Pero para los casos en los que hoy se ha comenzado a aplicar esta modalidad, hay aspectos que ya son analizados desde la óptica de sus beneficios.

Se espera que la aplicación de este tipo de penas sustitutivas, contribuya a evitar que muchos delincuentes debutantes terminen "haciendo carrera" en el crimen, encontrando en las cárceles verdaderas escuelas. También las penas alternativas contribuyen a promover la reinserción y evitar el hacinamiento en las cárceles. Ahora, no todo queda en manos de los aparatos electrónicos. El Estado, a través de sus organismos pertinentes, debe preocuparse no sólo de que el sistema funcione, sino de que cumpla los objetivos sociales y de reinserción que también implica.