Disfrutemos la primavera
Con la llegada de la primavera, el clima mejora, los días se vuelven más largos y soleados, es la temporada idónea para pasar más tiempo en familia y disfrutar de los nuestros bajo el sol y en sintonía con la naturaleza. ¡Hay tantas cosas que se pueden hacer fuera de casa! Andar en bicicleta, hacer un pequeño picnic, se puede hacer hasta en el patio de la casa, pasear por el parque, recorrer los alrededores, realizar caminatas o visitar plazas de juegos infantiles al aire libre.
Está demostrado que estar en contacto con la naturaleza, mejora la memoria, concentración, el ánimo y reduce el estrés y, en definitiva, nos hace más felices.
La primavera no sólo trae su despliegue de color y buen tiempo, sino que además es la estación ideal para pasar más tiempo juntos, realizando algún deporte o un deber, como por ejemplo ordenar y limpiar la casa, que, si bien es cierto, no es una actividad divertida, si se realiza en familia se hará más amena. Por lo demás, desde el punto de vista de los niños, esta la antesala para las fiestas de fin de año y vacaciones que ya se vienen encima.
En esta estación pasan muchas cosas entretenidas, como por ejemplo nacen animales, empiezan a crecer las flores y todo se torna más verde, por eso la primavera es la estación perfecta para explorar junto a la familia los encantos de la naturaleza.
Esta estación también influye en el despertar de los sentidos de los niños. Ellos preguntan, hablan, experimentan y tratan de encontrar sentido a todo lo que se refiere al medio ambiente, por lo que es un buen momento para satisfacer estas inquietudes y curiosidades, fomentando la exploración e interacción con el entorno, puesto que de esta forma se les estimula su autoestima, se les invita al diálogo, a la reflexión, etc. Esta labor educativa orientada a los intereses del niño y a su formación se facilita a través del juego y el placer en divertirse.
La llegada de la primavera también se relaciona con las áreas cerebrales que regulan los estados de ánimo, los procesos de sueño y vigilia, el apetito o la sed.
Muchas personas disfrutan de la primavera: exteriorizan su mejor humor, ven que pueden realizar más y nuevas actividades, manifiestan mayor interés por estar con otras personas y por salir al exterior.
Sin embargo, existen personas que ven afectado su estado de ánimo durante este periodo, siendo invadidos por la tristeza y dejando abierta la puerta para que la depresión aceche; el trastorno se explica porque los cambios en la duración e intensidad luminosa y en el aumento de la temperatura durante la primavera, gatillarían alteraciones en los sentimientos de las personas.
En todo tiempo, pero más ahora, es necesario cuidar de sí mismo: comer equilibradamente, dormir lo suficiente y hacer ejercicio, como por ejemplo caminar más. Reunirse con amigos, hablar, compartir con la familia y sus seres queridos le ayudará a moderar su estado de ánimo.