Aprobación de la Reforma Tributaria dejó desconfianza
La aprobación de la Reforma Tributaria (RT) fue un mero trámite, pues la desconfianza quedó instalada en los agentes económicos producto de la forma y el fondo en el proceso de tramitación. La aparente unidad que se buscó mostrar al momento de aprobar el proyecto de ley, es insuficiente para que la señal de estabilidad enviada por el Gobierno devuelva la confianza de los agentes económicos para recuperar la dinámica de la inversión privada. Así lo estimó ayer Renato Segura Domínguez, director de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad San Sebastián.
El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, estimó que la aprobación del proyecto de RT en la Cámara de Diputados y que dio fin a su trámite legislativo 'fue un momento histórico'.
El secretario de Estado enfatizó que 'lo que nos queda es trabajar con mucho ahínco en la implementación, para que esté generando recursos en el último trimestre de 2014 y lo más importante, para 2015'.
El ministro Arenas reiteró que en la Ley de Presupuestos del próximo año se incluirán recursos adicionales por al menos US$2.300 millones.
Aseguró que el despacho del proyecto 'es importante para la economía, porque los agentes económicos también requieren de estabilidad, certidumbre. Hoy tenemos el marco tributario que nos va a acompañar en los próximos años, no sólo en esta administración, sino que también en las siguientes'.
Segura, por su parte, dijo que las razones de la desconfianza que explican esta realidad, se basa en dos aspectos que 'para mí son cruciales: La ley aprobada mantiene la incertidumbre en muchos aspectos, toda vez que los reglamentos que permitan aplicar dicha ley pueden captar una parte importante del componente ideológico mostrado en la etapa de diseño y discusión del proyecto, y muchos de los inversionistas interesados, han volcado la mirada hacia otras economías del planeta que ofrecen mayores garantías. Por ejemplo, el Presidente de Uruguay recibió con júbilo la inauguración del complejo industrial Montes del Plata, que significó una inversión de más de US$2.270 millones, cofinanciado por Empresas Arauco y Stora Enso'.