Grafiteros
'La muralla es el papel del canalla', o 'El muro es el pizarrón del cobarde' o 'El muro y la muralla son el papel del canalla', rezaban unas antiguas oraciones que se analizaban en lógica gramatical, con el análisis correspondiente de artículos, sustantivos, preposiciones, verbos, sujetos, predicados, etc.
Afloran en el recuerdo, análisis y sintaxis luego de asistir a una interesante conferencia sobre Grafiti y Arte, ¿Arte Urbano? Expresión nacida en NY y vigente en Chile desde los años 80.Como los hongos después de la lluvia, este ¿Arte? ha proliferado en todas los lugares del planeta y ha ido escalando espacios hasta llegar a los museos mundiales, destruyendo a su paso la propiedad privada, dañando bienes públicos, y espacios patrimoniales en aras de la libertad de expresión, de la anhelada acción de libertad; en una ansiedad por dejar huellas y trascender, tomando para ello, la ciudad como un lienzo donde plasmar sus creatividades.
Acá, el currículum oscila de un extremo a otro; desde simples garabateros a inscribirse en una universidad y desde la universidad a las calles, en el caso de otros. Actualmente, algunos de ellos ganan millones en Europa, desde donde les han contactado para pintar espacios urbanos, con inmensas paredes a sus disposiciones para realizarse, explayarse y trascender como ellos quieren, y sin embargo, eso no les complace, no les llena la tripa en ningún caso, reciben los euros y los dólares con una manecita y con la otra deben necesariamente tomar los tarros de pinturas, spray y otros bártulos, para no sentirse traicionando la esencia de un grafitero y que es pintar en el anonimato, (identificables sólo con la firma); pintar en la ilegalidad, en la clandestinidad, para seguir trascendiendo y encontrarle sentido a esta vida, con la correspondiente cuota de adrenalina que gatillan en sus cuerpos cada vez que, en las sombras, desparraman pinturas, rayan y desaparecen 'en menos que canta un gallo', además de como en un cuento de nunca acabar,los propietarios o municipios, si es que, borran las tamañas obras de arte y les dejan las paredes aptas para la siguiente intervención artística, (en nada envidiables a los dibujos de Altamira, Lascaux o Nazca, nada menos)y que nos presenten una ciudad alegre , colorida y pintarrajeada en reemplazo, por supuesto, de la generosa naturaleza.
En Machu Pichu multaron a los chilenitos que hace unos años, fueron a trascender a ese lugar patrimonial, acá en Chile, no pasa nada ¿y cómo podría existir, siquiera, una multa por ello?, hay otras cosas más importantes en las cuales perder el tiempo, que andarse preocupando por los rayados en la ciudad, y de un estudio sociológico del porqué de tanta exuberancia, sobre todo cuando los propios politiqueros tienen sus propias murallas. ¿Arte -o barbarie, nuevamente, para las generaciones futuras?
Declaro ser tan ignorante, que no entiendo nada.