Alertan sobre riesgos por uso de anticonceptivos orales
Un significativo aumento en el riesgo de padecer cáncer de mama estaría relacionado con el consumo de pastillas anticonceptivas que contengan altas dosis de estrógenos, diacetato y noretindrona, tal como lo advirtió un estudio publicado en la revista especializada Cancer Research.
Para el estudio se reclutaron a mil 102 mujeres que entre 1990 y 2009 fueron diagnosticadas con cáncer de mama y 21 mil 952 mujeres sanas de Group Health Cooperative, ubicada en la misma Seattle.
Los registros electrónicos farmacéuticos también fueron utilizados para recopilar información sobre los diferentes anticonceptivos orales, incluido el nombre de cada medicamento, dosis y duración.
Los resultados arrojaron que, en comparación con las mujeres que nunca consumieron o suspendieron el uso de estas pastillas, el riesgo de padecer cáncer de mama al tomar estas píldoras aumentó en un 50%.
De manera más específica, las pacientes que tomaron altas dosis de estrógeno aumentaron el riesgo 2,7 veces más, en comparación a las pastillas con niveles más moderados.
Las píldoras anticonceptivas con exceso de diacetato aumentaron 2,6 veces la tasa, mientras que los medicamentos trifásicos que contienen 0,75 miligramos de noretindrona acrecentaron 3,1 veces el riesgo.
'Nuestros resultados requieren confirmación y deben interpretarse con cautela. El cáncer de mama es raro entre mujeres jóvenes y hay numerosos beneficios asociados al uso de anticonceptivos orales que deben ser considerados. Además, hay estudios previos que sugieren que el mayor riesgo asociado con el uso reciente de anticonceptivos orales disminuye después de suspender los anticonceptivos orales', aclaró Elisabeth F. Beaber, perteneciente a la División de Ciencias de la Salud Pública del Fred Hutchinson Cancer Research Center en Seattle, Estados Unidos.
Situaciones como la menstruación tardía o la menopausia temprana son parte de los factores de riesgo del cáncer de mama, enfermedad que afecta a millones de mujeres en el mundo.
Los especialistas coinciden en que las mujeres deben consultar a su médico, evitar la automedicación y llevar un control estricto sobre el consumo de este tipo de píldoras para evitar perjuicios en el organismo.