A 1.030 subió la cifra de muertos por ofensiva en Gaza
A 1.030 subió el número de muertos en Gaza, en medio de la ofensiva militar israelí que comenzó el 8 de julio pasado.
Según el Ministerio de Sanidad, 130 cadáveres de hombres, mujeres y niños fueron rescatados por los servicios de emergencia durante las labores de remoción de escombros realizadas en las primeras nueve horas del alto al fuego humanitario pactado entre el movimiento islamista Hamas e Israel.
'En 19 nueve días de bombardeos y ataques la cifra de muertos ha ascendido a 1.030 personas y la de heridos ha superado los 6.000' hasta ahora, indicó una fuente sanitaria.
Los intensos y constantes ataques por tierra, mar y aire del Ejército israelí sobre toda Gaza, especialmente castigada en el sur y el norte, no habían permitido hasta la fecha a ambulancias y miembros de los equipos médicos aproximarse a algunas áreas.
El movimiento islamista Hamas e Israel pactaron una tregua humanitaria de 12 horas, que las dos partes habían respetado.
Los servicios de emergencia emplean este lapsus para atender y recuperar víctimas, mientras que la población se abastece y los esfuerzos diplomáticos por ampliar el cese de hostilidades y dejar espacio al diálogo prosiguen.
Sin embargo, milicianos palestinos dispararon cuatro proyectiles de mortero contra localidades israelíes alrededor de la franja, minutos después de concluir oficialmente la tregua humanitaria de 12 horas gestionada por la ONU.
Los misiles hicieron saltar las alarmas antiaéreas en el concejo regional de Eshkol, fronterizo con Gaza, sin causar daños ni víctimas, según fuentes militares.
El sistema de alerta con los nombres de las localidades afectadas y su código en el sistema nacional de defensa civil, saltó también en la esquina superior derecha de las pantallas de televisión, de la que había desaparecido en las últimas doce horas.
Israel y Hamas respetaron de forma estricta la tregua humanitaria a instancias de la comunidad internacional para permitir a la población de Gaza aprovisionarse y rescatar a los heridos de las zonas más castigadas. Una hora antes de concluir, Jerusalén anunció que la prorrogaba hasta medianoche, pero el movimiento islamista no dijo si adhería.