El Clase S Pullman de Mercedes-Benz tendrá tres filas y costará casi el doble de la línea tope de gama de Rolls-Royce, convirtiéndolo en el sedán más caro del mundo cuando salga a la venta el año que viene.
Con un precio de alrededor de US$1 millón, el vehículo blindado tendrá cuatro asientos traseros que se enfrentarán entre sí y estarán separados del compartimiento delantero del chofer por una ventana de partición para garantizar la discreción, de acuerdo a lo revelado por una persona familiarizada con los detalles de la estrategia de la marca.
El Pullman será la culminación de la expansión continua de la marca alemana que considera seis modelos, el doble del número de variantes en el pasado. El plan incluye una coupé deportiva que sale a la venta este otoño.
Con el nuevo Clase S de alta gama, 'están tratando de evocar al famoso y antiguo 600 Pullman que fue utilizado por personas desde dictadores hasta John Lennon', dijo Tim Urquhart, analista con sede en Londres de IHS. 'Quieren demostrar que Mercedes sigue en pie para una élite absoluta, de lujo y opulencia. Existe un valor simbólico con este tipo de coche'.
El máximo responsable ejecutivo, Dieter Zetsche, está apostando al Clase S para avanzar en su objetivo de superar a BMW y Audi en ganancias y entregas a finales de la década. El ejecutivo revisó el diseño por lo menos de una docena de versiones y probó el coche en la Selva Negra de Alemania, Sudáfrica, Suecia y los EE.UU. para encontrar el equilibrio adecuado entre comodidad y manipulación.