Diversas actividades han cumplido en los últimos días sostenedores y apoderados de los colegios particulares subvencionados, con el fin de analizar en detalle la Reforma Educacional y también, en busca de que sus planteamientos sean realmente escuchados por el gobierno, en aspectos claves, porque de ellos depende decidir sobre su futuro.
Uno de los recientes encuentros se realizó en el auditorio Marta Montory de la Universidad San Sebastián, donde más de 120 representantes de colegios particulares subvencionados de las cuatro provincias de la Región analizaron los alcances legales del proyecto de Reforma Educacional.
La actividad fue encabezada por la directiva regional de Conacep Chile, cuyo presidente, Daniel Villarroel, sostuvo que 'este proyecto raya en la inconstitucionalidad, porque atenta contra el derecho a la propiedad de los sostenedores, a quienes obliga a convertirse literalmente en un rehén de una venta que no está dispuesto a hacer. Porque el Estado se convierte en el único posible comprador. Además, atenta contra el derecho de las familias a elegir el proyecto educativo que prefieren para sus hijos'.
Villarroel recordó que los colegios particulares subvencionados de la Región nuevamente volvieron a obtener resultados positivos en la prueba Simce. Respecto al tema, David Cáceres, secretario de Conacep, indicó que, 'pese a que este año el gobierno evitó realizar comparaciones por sector, lo cierto es que la mayor parte de nuestros establecimientos mostró avances sustanciales, que responden a la confianza que los padres ponen en nosotros'.
En la reunión también tomaron parte representante de los colegios especiales de la zona y la directiva regional de la Confederación Nacional de Padres y Apoderados, quienes confirmaron que continuarán con las acciones públicas de oposición a la reforma. 'El próximo 5 de julio tenemos organizada una caminata regional para manifestar públicamente nuestro rechazo a la falta de disposición al diálogo demostrada por el gobierno', indicó Alexis Bravo, presidente de Confepa.
Maritza Rebolledo, sostenedora de la escuela especial penquista Háblame de Amor, unidad especializada en autismo y discapacidad auditiva para niños de entre 2 y 8 años, dijo que en la provincia son 43 escuelas especiales, la mayoría de ellas particulares subvencionadas. Teme que varias no podrán continuar su labor: 'Más del 70% somos arrendatarios, de bienes de cerca de $230 millones. Tendremos que ser particulares pagados o cerrar. Pero, más del 80% de las familias no puede pagar. Sabemos qué habrá escuelas para ellos, pero ¿qué escuelas?, los padres creen en nuestro proyecto. No sabemos qué vamos a hacer'.
son los colegios