Secciones

Regresa la saga que combinaacción con trasfondo social

E-mail Compartir

Generalmente se puede hablar de desequilibrios e inconsistencias cuando se trata de películas de superhéroes. Por ejemplo en casos como 'Súperman' o el 'Hombre Araña' hemos visto como tras el declive de una saga aparece otra con nuevos intérpretes, villanos y giros en la historia. Caso aparte para 'Batman', con el recuerdo de la serie kitch de los sesentas, la estilizada versión de Burton con continuaciones de poco peso, la sublime trilogía de Nolan y un nuevo anuncio con Ben Afleck como Bruce Wayne.

Allí es donde 'X Men' se anota uno de sus primeros puntos a favor. La primera trilogía impulsada por el director Brian Singer tiene la notable cualidad de superarse en cada entrega, mientras que en el spin off de 'Wolverine', se mantuvo la estética, personajes y el trato fílmico de la entrega previa. Cuando se pensó que tras el fin de la saga no quedaría mucho más que ver, llegó la precuela 'First class', y aquello que en principio parecía una movida para recaudar millones sin tanto esfuerzo creativo dio la sorpresa a través de una historia sólida, efectos notables e interpretaciones a la altura de la saga. Ello no era fácil; los protagonistas 'Profesor X' y 'Magneto' adquirieron vida en la actuación de los insuperables Patrick Stewart e Ian Mackellen, pero sus versiones jóvenes a cargo de James McCavoy y Michael Fassbender ciertamente estuvieron a la altura.

En aquel filme, Magneto Charles Xavier van reclutando a los primeros X-Men y aparece Hugh Jackman como Wolverine rechazándolos, estableciendo el puente con la saga de Brian Singer. Incluso con esa señal, costó imaginar que ambos mundos llegaran a fusionarse de la manera en que lo hacen en 'X-Men. Días del futuro pasado', una de las cintas de acción que más expectativas ha generado esta temporada, y que tiene su debut este jueves en las salas nacionales. Sin embargo algunos penquistas podrán verla con anticipación gracias a la avant premier de El Club de Lectores de Diario El Sur, esta noche en Cinemark Bío Bío.

En la nueva entrega vemos como los personajes en ambas etapas de sus vidas, tras un viaje en el tiempo con Wolverine como enviado para una misión que será crucial para el futuro de los mutantes. Sólo él puede lograrlo al tener la capacidad de sanar su cuerpo.

Bastante poco es lo que se ha develado sobre la trama y los fans hasta ahora sólo han podido ver un adelanto de nueve minutos que, obviamente, se ve sorprendente, intenso y lleno de acción, pero aún así el estreno de esta semana no ha hecho más que generar incertidumbre. ¿Se tratará de una apuesta sólo para aprovecharse de los seguidores de la saga o mantendrá la calidad argumental y el ritmo implacable de la primera saga?.

Lo que afortunadamente auspicia más la segunda opción es el retorno de Brian Singer en la dirección, un talento que antes de meterse en el mundo del cómic había realizado cintas dramáticas de primer nivel como 'Apt pupil' o 'Los sospechosos de siempre', un caso que guarda ciertas coincidencias con Cristopher Nolan antes de Batman.

'La razón más grande por la que quise regresar a X-Men', no sólo fue por el inmenso reparto y la esfera de acción de la historia, sino también por la manera en la que aborda cosas que hasta este punto no se habían experimentado en películas de X-Men, como lo es viajar en el tiempo. Son elementos que se han desarrollado en las tiras cómicas durante muchos años. Me parece que con cada película necesitas hacer algo nuevo, y puedo garantizar que hay muchas cosas nuevas en 'Días del Futuro Pasado'', sostuvo el director.

Singer menciona otro factor clave: las actuaciones. El reparto es impresionante y la gran mayoría han tenido nominaciones previas al Oscar o lo han ganado. Halle Berry, Jennifer Lawrence, Ellen Page, Ian MacKellen, Anna Paquin, Michael Fassbender o el propio Jackman conforman un reparto de lujo. Pero además está el hecho de que para muchos de ellos la saga fue su puerta de ingreso a la industria del cine y ocupa un lugar especial en sus carreras y en sus vidas.

El otro punto a favor es el trasfondo que desde sus inicios ha tenido 'X-Men' (ver recuadro). Siempre se ha advertido como diferencia entre los héroes de Marvel y los de la compañía rival DC Cómics, que los primeros buscan una mayor identificación con sus lectores, abordando problemáticas comunes en sus personajes. En el caso de los mutantes el tema principal tiene que ver con la discriminación, con la forma en que tratamos a quienes son diferentes, y eso es algo con lo que muchos han tenido que lidear.

Allí los humanos son prejuiciosos, débiles, temerosos; y los mutantes, siempre maltratados sin motivos sólidos para respetarlos. En esa línea está Magneto, mientras que Charles Xavier es más abierto. No son rivales, son grandes amigos, pero sus distintas posturas ideológicas los ponen en pugna. Allí está la fuerza motora que justifica el devenir de este fantástico grupo de personajes.