Jennifer Lawrence y la gracia de volver a convertirse en mutante
El 22 de mayo se estrena la esperada nueva entrega protagonizada por los personajes creados por Stan Lee y Jack Kirby en 1963. Una historia de viajes en el tiempo, luchas y estados relativos.
Jennifer Lawrence (23) tiene un atractivo que traspasa, incluso, su propia filmografía. De sus 16 películas a la fecha -debuta con "Garden party" en 2008- tiene un par que meritoriamente se inscriben entre lo más interesante del cine independiente y comercial norteamericano: "Winter's bones" (2010) y "Los juegos del hambre" (2012).
La primera, dirigida por Debra Granik es un gélido acercamiento al cuadro familiar en quiebra, cuya redención es imposible. O casi, sobre todo si los antagonistas se enfrentan con un personaje como Ree Dolly. Allí Lawrence construye un papel desde la lejanía, pero involucrando cada texto en un drama de movimientos internos más que externos.
Algo de este papel que, finalmente fue su salto al estrellato, proyecta en el rol de Katniss Everdeen, en el debut de la interesante saga "Los juegos del hambre". Más allá de esa cuestión juvenil propia de la venta y mercadeo contemporáneo, Jennifer Lawrence se pone al servicio de un personaje sufrido y que constantemente pareciera estar enfrentando sus miedos, riesgos y oportunidades. El acto de la muerte -la acción- sobrevuela lo físico para mostrar un ser de carne y hueso entre tanto cine de acción sin sentido.
Sin duda, Jennifer Lawrence le suma otro pálpito a sus personajes, uno más humano, terrenal en el corazón mismo del fantástico.
ATRACTIVA MUTANTE
Una prueba de su prestancia histriónica quedó demostrada cuando al año siguiente de "Winter's bone" la vimos convertida en Mystique (Raven Darkhome) en la interesante "X-Men: primera generación", dirigida por Matthew Vaughn.
Allí rondaban dudas, como esa cuestión de estados relativos al momento de tomar decisiones, presente en los héroes Marvel. Y estaba Jennifer Lawrence, en la figura y colores que igualmente dejaban entrever su talento. Es lo que también podrá apreciarse en la esperada "X-Men: días del futuro pasado", ahora dirigida por Bryan Singer y cuyo estreno está anunciado para el 22 de mayo.
"Fue interesante retomar al personaje, pues hacemos esta película, que se ubica con muchos años de diferencia entre las distintas partes; y hay una enorme transformación para cada personaje. Así que de cierta manera es emocionante, ya que cada vez que vemos a Raven-Mystique ha cambiado", explica la actriz sobre este regreso, a 12 años del debut como el personaje azul.
Singer, quien lanzó la serie fílmica "X-Men" en 2000, es otro que vuelve al set de los mutantes. En este caso, luego de los más de 10 años transcurridos desde la primera y una década de la segunda entrega fechada el 2004.
"Hubo un pequeño fan dentro de mi que saltó y gritó por la emoción cuando decidió dirigir esta película. Es increíble trabajar con él, pues conoce a los personajes por dentro y por fuera y su emoción y sus conocimientos te inspiran más para hacer este trabajo", destaca Lawrence.
- Esta película es enorme (...). ¡Conocí a Hugh Jackman! Tuvimos a todo el elenco original. También fue un poco intimidante regresar, ya que ahora este es un asunto mucho más grande al que se sintió cuando hicimos Primer Generación. En aquel entonces todos estábamos un poco más tímidos, no sabíamos cómo iba a resultar (...). Cruzamos los dedos esperando que todo saliera bien.
UN POCO DE HISTORIA
"X-Men: días del futuro pasado" muestra a los personajes en una lucha por conservar su vida. De alguna forma corren peligro de extinguirse frente a la presencia de los llamados robots Sentinel.
Masivamente presentes, estos "personajes" desarrollados por Bolivar Trask (Peter Dinklage) representan su odio por los mutantes. En este ambiente, Charles Xavier (Patrick Stewart), Erik "Magneto" Lehnsherr (Ian McKellen) plantean una estrategia para que Wolverine viaje en el tiempo. La idea es que regrese a 1973 para reclutar a las versiones más jóvenes de ellos y enfrentar a los Sentinel.
"Nunca vi el robot físico. Toda la actuación viene de nuestra imaginación, así que si uno se imagina que alguien te está rompiendo tu corazón o que estás siendo atacada por robots gigantes... todo proviene del mismo lugar", explica la actriz oriunda de Kentuky.
- Es un actor grandioso y todo eso, pero también es muy chistoso. Además, amo Game of Thrones. Cuando él llegó al set, una amiga y yo nos emocionamos, ya que vemos la serie juntas. En ese momento, tenía mi maquillaje azul, saqué la cabeza por la ventana del trailer y corrí hacia él (...). Fue mi momento de fanática. Se me olvidó que lucía como una lagartija azul, nunca me preocupé por eso. Pero él fue una persona grandiosa con quien trabajar. Es muy bueno para ser encantador al mismo tiempo que es perverso.
- Cuando me preguntan cómo es él, no sé ni por donde empezar. Es la persona más jovial, amable, simpática y dulce todo el tiempo, además de un asombroso actor. Es un tipo extraordinario.
- Hubo una escena donde salto por la ventana. Mi doble acrobática estaba haciendo eso, donde caía, rodaba y llegaba a la marca convenida en la escena. Yo dije que lo podía hacer, ya que soy muy buena para caer (...). Lo mismo me sucede en la vida real.