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"En la Región no se ha respetado el real peso de la DC"

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-Estamos todos de acuerdo con ella, pero la Reforma Tributaria es una reforma estructural. Es el antecedente a la Reforma Educacional y es necesaria, pero como es estructural, tal como en sus tiempos lo fue la reforma agraria, no se puede hacer de la noche a la mañana y aplicando la suma urgencia. Creo que debe haber un espacio de diálogo y de consenso. Es tan relevante, que no se puede hacer contra la derecha o contra la gente poderosa. Ojalá, en lo posible, se realice con el consenso de ellos, porque es una reforma que no está hecha para cuatro años más, sino para los próximos cuarenta o cincuenta años.

El próximo 18 de mayo se realizarán las elecciones internas de la Democracia Cristiana (DC), oportunidad en que se escogerá a la directiva regional.

Hasta unas semanas atrás era incierta la realización de estas votaciones en el Bío Bío, ya que se intentó generar un acuerdo que dividiera el tiempo de gestión en partes iguales para ambas listas que deseaban liderar a la colectividad.

En un primer momento, se dijo que podría estar un año en el cargo de presidente el diputado Jorge Sabag y al siguiente año, el alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz.

Sin embargo, la idea no prosperó y ambas listas (la cercana al clan Sabag y la partidaria del clan Ortiz) se enfrentarán en los próximos comicios internos. Como candidato continúa Jorge Sabag, pero no Ortiz. En su lugar se ha postulado el ex director del Servicio de Salud Concepción, Jaime Sepúlveda.

El diputado Sabag afirma que él era partidario de que existiera un acuerdo. "Me pareció que habría sido relevante que yo ocupara un año el cargo y que el otro año lo hiciera Álvaro (Ortiz). Eso habría sido una señal muy potente para la Región y el país, de recambio generacional, de unidad y de que la DC tiene un futuro. No pierdo la esperanza de que todavía podamos lograr ese acuerdo. Porque a mí no me interesan los cargos, me interesa la permanencia del partido en el tiempo", asegura.

-Nosotros intentamos un acuerdo con la otra lista, lamentablemente no prosperó. Pero, no tenemos ningún drama con el hecho de no haber llegado a un acuerdo tampoco, porque la democracia implica competir. En el caso de las elecciones internas, el 70% de las regiones tendrá elecciones. Por lo tanto, no hay ningún drama en no haber llegado a un consenso.

-Diría que no existen grandes diferencias, hay matices. Nuestra lista no está tan conforme con la cuota de participación que tiene la DC en el actual gobierno, lo consideramos completamente insuficiente. No ha sido considerada en los ministerios sociales y la voz del partido se va a ver bastante atenuada. En la Región no se ha respetado el real peso de la DC. Si bien tenemos al intendente, no tenemos una adecuada representación en todos los ministerios y eso es algo que nos duele, porque la situación de la DC hoy es compleja. Hemos perdido dos senadores, con eso hemos perdido peso en las decisiones.

-En mi corazón no existe esa división. Siempre he valorado el gran liderazgo de José Miguel Ortiz quien, a mi juicio, debió haber sido el candidato a senador natural en la Región y perdimos una oportunidad. Valoro el liderazgo de Álvaro Ortiz en la segunda comuna más importante del país. Más allá de las legítimas diferencias, que siempre van a existir en toda colectividad política, este partido tiene como misión mirar más allá de los liderazgos particulares y buscar la unidad del partido que nos va a hacer fuertes. Tengo la posibilidad de liderar ese proceso, porque problemas personales no tengo con ningún sector o camarada específico.

MIRAR AL FUTURO

-Si tenemos éxito en la elección, pretendemos fortalecer las bases teniendo un contacto permanente con ellas, promover los liderazgos jóvenes y femeninos, para proyectarlos al futuro. Tenemos liderazgos importantes como el de Álvaro Ortiz como alcalde, el de Marcelo Chávez, el de Ivonne Rivas en Tomé, de Ángel Castro en Santa Juana o de Víctor Hugo Figueroa en Penco. La DC debe mirar al futuro a través de nuestros líderes jóvenes.

-Esa es la impronta que quiero imponer si me va bien: una nueva generación, respetando la experiencia y sabiduría de los que han entregado mucho por el partido. Y quiero aportar para que la identidad de la DC esté presente en la Nueva Mayoría. No estamos en el gobierno para levantar o bajar la mano cuando otros lo digan, estamos para levantar nuestra voz por los que no tienen voz, para razonar y opinar qué es lo mejor para el país en este momento. Por eso hemos alzado la voz en el tema de la reforma tributaria, porque hay temas que nos parecen preocupantes.

-La etiqueta de progresista está de moda y todos la quieren usar como si se tratara de una marca de ropa que todos quieren lucir. No nos interesan las formas, nos interesa el fondo, que es una lucha contra la desigualdad que ha persistido en Chile, a pesar de los avances y de que se ha reducido la pobreza. La distribución del ingreso y la desigualdad en Chile sigue prácticamente intactas. Esas son las luchas que nos motivan y puede que tengamos diferencias. No somos iguales dentro de los siete partidos de la Nueva Mayoría, que no es un charquicán en que todo se confunde. Nosotros representamos al mundo evangélico, católico, a la gente modesta, de clase media en general, por eso debemos alzar la voz.

-Nunca he sido muy bueno para eso, pero tenemos una posibilidad cierta de ganar. Nos interesa el recambio generacional, liderar un proceso de reposicionamiento.