Secciones

Depreciación instantánea, ¿apoyo real para las pymes?

E-mail Compartir

Hemos visto, en distintos medios, a diversas autoridades de gobierno tratando de explicar en términos sencillos, los alcances de la reforma tributaria enviada al Congreso a fines de marzo.

No existe coincidencia plena entre todos los sectores sobre el impacto que esta reforma podría tener en el empleo o en el crecimiento, así como la situación en la que quedaran las pymes y los emprendedores en general.

Se ha mencionado como medida paliativa para las pymes el mecanismo de la depreciación instantánea que permitirá a estas empresas, rebajar en forma automática y en el primer ejercicio, el monto total de las inversiones en activos tangibles, tales como maquinarias, edificios, vehículos, etc. La depreciación es una estimación contable que busca incluir en los costos el factor de uso de estos bienes. En ese contexto, depreciar en un ejercicio, si bien permitirá ahorrar impuestos ese primer año, necesariamente implicará un mayor pago de impuestos en los años siguientes, creando la figura que financieramente se conoce como Impuesto Diferido.

Para una pyme que comienza, podría ser atractivo usar el mecanismo, puesto que el dinero que estaría ahorrando, podría ser valioso tenerlo en la empresa, sobre todo el primer año, por las rentabilidades que eventualmente se generarán. No obstante, esta franquicia requiere que el emprendedor o empresario, sea extremadamente ordenado con sus flujos de caja, vale decir, que provisione hoy, el mayor impuesto que tendrá que pagar en los años siguientes.

Si nos atenemos a la experiencia real de las pymes y de los emprendedores, esto parece ser bastante difícil de lograr. Al inicio, cada peso vale y claramente nadie estará pensando en los impuestos a futuro. Además, administrar esta franquicia necesita ciertos conocimientos financieros que la mayor parte de los emprendedores no tiene. Habrá que ver como se materializa esta oferta tributaria y si realmente será un real apoyo para la pyme y para el emprendimiento o será solo un problema más que superar en el difícil camino de un emprendedor.

Tema aparte es el hecho que esta franquicia está orientada a empresas intensivas en capital físico, entonces ¿Qué opción tienen las cientos de Star-Up (empresa naciente) asociadas al conocimiento, sobre todo en una época donde la información puede ser más valiosa que un bien físico?

José Navarrete Oyarce

Académico del Magister en

Tributación UNAB.

Doble presencia: las mujeres en la familia y el trabajo

E-mail Compartir

Algo o alguien en algún momento de la historia (quizá desde la prehistoria) definió que los roles del hombre y la mujer en la sociedad era distinto: El hombre era quien salía del hogar a trabajar en busca de recursos económicos que permitieran solventar la adquisición de diversos insumos necesarios para la vida diaria, y la mujer como aquella persona encargada de todos los quehaceres propios del hogar, desde el cuidado de los hijos hasta aspectos propios del desarrollo de una casa.

Lo anterior, que duda cabe, cambió. Hoy la mujer se inserta, de la misma forma que el hombre en el mundo laboral y muchas veces son ellas el principal sustento económico de la familia.

Este cambio no ha sido exento de diversas dificultades para la mujer y la familia en su conjunto, uno de ellos es el fenómeno de la "Doble presencia"

La doble presencia dice relación al peso que recae en las mujeres cuando éstas salen al mundo laboral sin dejar la responsabilidad histórica del hacerse cargo del hogar. Aunque se haya producido una progresión en la incorporación de la mujer al mercado laboral en los últimos años, no se ha dado la misma progresión en cuanto a la participación del hombre en la sistema familiar. Algunos estudios indican que las mujeres aumentan considerablemente el tiempo diario dedicado al trabajo doméstico (Entre 5 a 6 horas diarias) lo que duplica e incluso triplica al trabajo realizado por los hombres, el cual alcanza aproximadamente 2 horas (en promedio) al día.

Es la mujer (en la mayoría de las familias) la única que trata de compatibilizar ambos sistemas, por lo que el problema de la conciliación afecta principalmente a ellas ya que son las responsables "exclusivas" de la carga familiar y doméstica, lo que puede generar graves problemas de salud, los que se asocian principalmente a cuatro dimensiones: Salud Mental, Vitalidad, Síntomas cognitivos del estrés y Síntomas conductuales del estrés.

Esta situación es la que viven en nuestro país día a día muchas mujeres madres de niños con cáncer, al enfrentar el dilema entre cuidar a sus hijos y apoyarlos en tan duro tratamiento o seguir trabajando para no perder un ingreso económico justo cuando los gastos aumentaran considerablemente.

Usted cree que una madre puede trabajar y "rendir" de la manera normal sabiendo que en el Hospital esta su hijo siendo sometido a largas quimioterapias, que involucran anestesias, inyecciones, nauseas y muchas cosas más. Usted cree que un niño puede resistir todos esto sin su madre.

Tanto la doble presencia como el cuidado de los niños con cáncer son temas que en países como España, Inglaterra, Suecia, entre otros han sido motivo de profundos estudios que han sustentado la generación de políticas públicas de legislación laboral que permitan subsanar en parte los problemas que estos temas implican para las familias.

En Chile, desde el 2012 como Agrupación de Padres de Niños con Cáncer, hemos realizado los estudios y gestionado con el Parlamento y el gobierno de esos años la legislación al respecto, encontrando eco solamente en los senadores y diputados, en donde en ambas cámaras fueron aprobados los respectivos proyectos que esperaron la firma del ex presidente Piñera que nunca se logró, en parte debido a la insensibilidad de la entonces ministra Matthei, quien personalmente nos indicó la inviabilidad del proyecto.

Hoy nos encontramos bajo una administración gubernamental que sustenta sus acciones en valores radicalmente distintos a los de la administración pasada, por lo cual tenemos la esperanza de encontrar la política pública que alivie en parte el dolor que viven las familias cuando la bomba del cáncer cae en sus casas.

Álvaro Acuña Hormazábal

Magister en

Gerencia y

Gestión Pública

Agrupación de Padres de

Niños con

Cáncer.

Valor social: sentido olvidado del trabajo

E-mail Compartir

En el Día Internacional del Trabajo celebramos a los trabajadores que históricamente se han unido para lograr reivindicaciones sociales y laborales, que es el origen del movimiento obrero moderno en el mundo y la expresión de rechazo frente a una economía inhumana y egoísta que en su expansión generó nuevos sistemas de esclavitud.

El trabajo es un derecho humano fundamental, pero a veces restringido al ámbito individual, olvidando su gran valor social, porque el trabajo es en su sentido más amplio un medio de colaboración social.

Una sociedad crece y se desarrolla por el trabajo de sus integrantes. Por él, los seres humanos ponemos en práctica capacidades y valores y los ofrecemos a la sociedad, nos vinculamos a otros y desarrollamos hábitos y formas de relacionarnos en distintos ambientes y tareas, somos capaces de asociarnos y visualizar los intereses comunes en la organización sindical u otro tipo de agrupaciones, comprendemos que el trabajo es un camino de integración y un medio de privilegiar la justicia social a través del esfuerzo y el reconocimiento mutuo.

Un trabajo digno y con un salario justo permite a muchas personas salir de la pobreza, ampliando las oportunidades de sus comunidades, compatibilizando la vida familiar y laboral en colaboración con la felicidad y autorrealización.

Por el contrario, al observar la realidad social, todos los pueblos que han sufrido la injusticia reconocen como determinantes para el fenómeno las condiciones laborales de los ciudadanos: el desempeño en condiciones indignas, salarios de miseria, horarios y ambientes abusivos, organizaciones y sindicatos corruptos, administraciones vulneradoras de los derechos laborales, desigualdad de género y discriminación.

Ahora que el país se acerca al pleno empleo, vale la pena detenernos y evaluar la retribución social al trabajo de chilenos y extranjeros que aportan a la sociedad sus talentos. Necesitamos avanzar hacia una valoración mayor del trabajo expresada en mejoras sustanciales a las condiciones de desempeño laboral de acuerdo a las características de las personas en su integralidad, fortaleciendo el respeto por sus derechos y considerando las diferencias del contexto.

Si contar con un 6,1% promedio de personas desempleadas ha contribuido a generar un país con mayores ingresos económicos, ¿cómo se logra que la mayor colaboración de los trabajadores a la sociedad les sea devuelta con empleos más dignos y justos? Desafío colectivo que debemos asumir para celebrar de verdad un día como éste.

Verónica Gómez Fernández

Académica

Trabajo Social Ucsc.