Consumo de azúcar
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó a los adultos con un índice de masa corporal normal reducir el consumo de azúcar al 5% de la ingesta calórica diaria, lo que equivale a unos 25 gramos (aproximadamente una cucharada sopera) al día. Hasta ahora, el organismo aconsejaba que el consumo de azúcar no superara el 10% de las calorías totales consumidas como azucares libres.
La OMS define como azúcares libres a todos los monosacáridos y disacáridos añadidos a los alimentos durante su procesamiento (fabricación), preparación (cocinado) o en la mesa (consumidor).
Se recomienda el consumo de azúcar según grupo etáreo: Niños menores de un año, no debería agregarse azúcar a postres, sólo utilizarla en mamaderas en caso necesario y según recomendación de su pediatra o nutricionista, según fórmula láctea indicada. Niños mayores de un año: comenzar a incorporar nuevas preparaciones pero se debe evitar alimentos ricos en azucares como jugos artificiales, bebidas o agregar azúcar a frutas naturales, evitar golosinas, evitar cereales de desayuno, tan comunes hoy en día ricos en azucares, se debe revisar etiqueta de alimentos. Lo mismo se sugiere en escolares y adolescentes, quienes aumentan su consumo de alimentos pero debe priorizarse por alimentos naturales ricos en proteínas de buena calidad (lácteos: leche descremada, yogur, carnes bajas en grasa, legumbres, huevos, etc.) y cereales ricos en fibra como los integrales, verduras y frutas.
Adulto-tercera edad-embarazadas: La recomendación es disminuir el consumo de alimentos ricos en azúcares libres tales como lo ya mencionado: bebidas, incluyendo aguas azucaradas, golosinas, excesivo consumo de pan que son ricos en hidratos de carbono (azúcar).