Investigadora acusadade fraude con células madre se defiende
La autora detrás de la investigación sobre células madre que fue acusada de fraude, la doctora japonesa Haruko Obokata, apareció por primera vez públicamente reconociendo errores en su estudio pero defendiendo los resultados y la existencia de las células STAP.
"Entiendo que para muchos investigadores los errores que he cometido son impensables. Pero los errores no afectan a la conclusión del estudio, y además los experimentos han sido llevados a cabo de manera precisa y los resultados están ahí", dijo la científica de sólo 30 años. Los abogados de la doctora señalaron que ha pasado los últimos días internada en un hospital debido a su mal estado físico y mental, luego de que quedara en estado de shock tras el escándalo.
Obokata fue acusada de fraude, luego de que la semana pasada publicara un estudio en la revista Nature comunicando un importante avance para la ciencia. La científica aseguró que había descubierto un método sencillo para producir células madre.
El escándalo se desató cuando muchos investigadores la acusaron de haber manipulado imágenes y duplicarlas en su presentación para documentar los artículos y la incapacidad para replicar los resultados del estudio.
La japonesa aseguró que nunca tuvo malas intenciones y, evidentemente emocionada, se disculpó por su falta. "Siento profundamente mi falta de conocimiento y el haber hecho las cosas a mi manera", dijo Obokata, quien además se ofreció a ir a ayudar a otros investigadores a reproducir el método para crear células madre.
El abogado de la joven investigadora, Kazuhiko Murotani, experto en propiedad intelectual, aseguró que las alteraciones a las imágenes no afectan el resultado del estudio, negando las acusaciones de falsificación. Así, la autora de la investigación aseguró que pudo reproducir células madres utilizando su método más de 200 veces.
Murotani, por su parte, explicó que las imágenes en cuestión no provenían de la tesis doctoral de Obokata, y que hubo una confusión con las diapositivas en Power Point. Así, el defensor alegó que la doctora no "fabricó" las imágenes desde cero, lo que implicaría que se falsearon los datos, si no que hubo un error en el orden que fueron presentadas, alegando que su defendida no se ha podido defender.
Luego de destaparse el escándalo en el mundo científico, el centro Riken de Biología del Desarrollo en Kobe, donde trabajaba Obokata, reconoció la semana pasada que el estudio tenía algunas partes fraudulentas.
Tras destaparse el fraude, el centro Riken formó un panel para investigar las acusaciones. Fue así como pudieron comprobar que dos conjuntos de imágenes utilizados en dichos artículos fueron o manipulados o modificados por la persona que lideró el estudio, la doctora Obokata.
El estudio demostraba un método muy sencillo para reprogramar células adultas (sumergiéndolas en un ácido o aplicando presión sobre sus membranas) y obtener así células madre, con capacidad para transformarse en cualquier tejido.
El presidente del laboratorio Riken, Ryoji Noyori, anunció que le darían una oportunidad a la científica para apelar antes de que el comité disciplinario del centro de investigación tomara una decisión al respecto. La defensa de Obokata presentó la apelación el martes.
La doctora Obokata aseguró por su parte, que tras el escándalo está determinada a continuar con su carrera científica, "no desde cero si no desde menos 100".