"En Chile observo un ecosistema de innovación extraordinario"
"Si el siglo pasado fue Asia quien llevó la batuta en innovación, en el XXI es Latinoamérica quien tomó el relevo". Eso es lo que aprecia el estadounidense Barry Katz, profesor de Humanidades y Diseño de la Universidad de las Artes de California y profesor de la División de Consultoría de Diseño de la Universidad de Stanford, que estuvo en Concepción participando de charlas en la Universidad del Desarrollo como parte del proceso de colaboración que llevan ambas casas de estudios.
Como todo buen docente, se apoyó dibujando gráficos mientras conversaba con El Sur para dar su punto de vista respecto a lo que ha podido observar. Aunque era su primera visita a Chile, y por supuesto a Concepción, se dio cuenta que el nivel en nuestro país es extraordinario. "Hay una especie de ecosistema de innovación, que todos los nodos involucrados, como por ejemplo el Club de Innovación, Corfo y la UDD, están conectándose en esa área. Es más de lo que esperaba, no estaba preparado para esto", confesó.
La generación de entre 25 y 35 años está "on fire" creando cosas nuevas. El futuro no está sólo en exportar lo que produce la naturaleza, como por ejemplo el cobre, que se envía y vuelve como componente de celulares o lo que hace Colombia enviando café que luego regresa con Starbucks, que vende el mismo producto, sino que está en las ideas para luego llevarlas a cabo. "Quizás la industria tecnológica no requerirá más cobre, por eso es necesario invertir en los ecosistemas de innovación", advierte.
Aseguró que si bien ha estado en otras naciones del continente sudamericano, lo que ha visto en Chile es inesperado, en infraestructura hay una generación más avanzada, sobre todo en lo que se refiere al ecosistema, donde se está desarrollando casi a pleno.
VALLEY
Katz es, además, autor de tres libros y ha sido editor de la Revisión del Diseño del Libro. Sus ensayos sobre la historia y la filosofía de diseño han aparecido en muchas revistas académicas, profesionales y populares, incluyendo Design Issues, ID Magazine, Metropolis y Dwell. Y hoy está trabajando en una historia del diseño de Silicon Valley, zona sur del área de la Bahía de San Francisco, en el norte de California, Estados Unidos, y que aloja muchas de las mayores corporaciones de tecnología del mundo y miles de pequeñas empresas en formación (start-ups). Originalmente la denominación se relacionaba con el gran número de innovadores y fabricantes de chips de silicio fabricados allí, pero definitivamente acabó haciendo referencia a todos los negocios de alta tecnología establecidos en la zona. En la actualidad es utilizado como un metónimo para el sector de alta tecnología de EE.UU.
Pero Katz cree que existe un problema. De ahí que se embarcó en este proyecto que verá la luz este año y que apunta a no se ha rescatado de buena manera la importancia del diseño en el crecimiento exitoso de este punto que acoge a compañías tan importantes como, por ejemplo, Adobe, Apple Inc., Ebay, Google, Hewlett-Packard, Nokia, Oracle Corporation o Yahoo! O también universidades como Berkeley, San José, Santa Clara, Stanford y San José City College.
PIEZA
Agrega que lo que habitualmente se rescata de Silicon Valley es lo clásico, como los ingenieros, la tecnología o la academia, pero el diseño es una pieza fundamental. Y explica que en el pasado existía una especie de línea en que el diseño estaba en una fase posterior al proceso de producción, donde el encargado llegaba con una idea, los ingenieros planeaban como hacerla funcionar y al final venía la parte de cómo sería visualmente. Hoy, según Katz, eso ya no funciona así. Ahora, las empresas no operan como una posta, sino que todos interactúan, son un equipo de diseño, hay más interactividad que funciona para todas las empresas.
El punto claro es que si bien el modelo de Silicon Valley ha sido muy exitoso, tiene sus propias características que no hay que copiar, cada uno debe desarrollar sus propias ideas.