Un crecimiento de un 6,3% de afiliados fue lo que tuvieron el 2013 las distintas isapres del país, siendo MasVida una de las que más aumentó durante este periodo, debido a que ha mantenido la política de no realizar alza en los planes base de salud, situación que mantendrán por octavo año.
Sin embargo, pese al balance positivo que se puede realizar de estas cifras, el presidente de la aseguradora de salud, el médico Claudio Santander, considera que hay situaciones que se deben subsanar, ya que para él "el mercado es muy imperfecto, poco transparente y las personas tienen poco conocimiento del sistema".
La postura que plantea Santander se basa en la resolución que adoptó el 2010 el Tribunal Constitucional respecto de la ley de 2005, en la cual planteó que los artículos que se refieren a la tabla de ponderadores por edad y sexo eran inconstitucionales, si bien la ponderación por carga sí era legal.
"Del momento en que se declaró inconstitucional una parte de la ley, los legisladores debieron haberse abocado a nueva ley, porque estamos con una normativa parcial y que hoy está cuestionada", comentó.
La existencia de una ley con falencias, donde no se especifica claramente de cuánto debe ser el aumento del reajuste en los planes de salud, ya que queda al libre albedrío de cada institución, es la situación que, a su entender ha provocado la judicialización de las alzas.
Durante el año 2013, los recursos de protección presentados en las cortes de Apelaciones del país llegaron a más 69 mil, es decir, tres veces más que 2011.
"Entonces, la ley se basa en la oferta y la demanda y eso no funciona (…) ¿Y qué se puede hacer? Se puede regular como se hace con el precio del kilowatt/hora o la tarifa telefónica, eso debiera hacerse en salud. Y esto tiene que ser hecho a través de una ley", sostuvo.
La opinión de Santander es una visión externa, ya que MasVida no ha tenido problemas de judicialización, debido a que no han aumentado sus planes.
A su juicio, esta situación no se da porque el modelo que utiliza la institución se basa en gestionar de buena forma para que las variables de costos que se generan por más licencias médicas, exámenes o consultas (gasto médico) no se traspasen a los usuarios.
"Consideramos que esta variación es muy significativa para nuestros cotizantes y es necesario que las gestionemos. Eso significa que tengamos un control más estricto del gasto en salud, sobre las licencias médicas fraudulentas. Que tengamos mejores convenios con clínicas, mejores precios con los laboratorios y radiología. Esa economía no se va a nuestros bolsillos, sino que se la traspasamos al cliente y ¿cómo lo hacemos? No reajustando los precios", declaró Santander.
Justifica esta situación porque a la institución le va bien, tiene "utilidades satisfactorias y prudentes".
"El modelo de MasVida es distinto al resto, con una cadena de valor muy potente y las personas poco a poco se han ido dando cuenta de eso. En la medida que más personas nos prefieran, la competencia está obligada a copiar el modelo", recalcó Santander.
Para el ejecutivo el sistema de isapres es bueno y así lo reflejan las cifras. No obstante, sostuvo que se "debe encaminar de mejor forma, regularlo mejor, hacer que las personas se informen más y que se produzca más competencia".
El año pasado el gobierno de Sebastián Piñera intentó apurar la nueva Ley de Isapres, sin embargo ésta no logró llegar al Congreso, por lo que será la nueva administración la que deberá analizar una normativa a través de una comisión presidencial.
-Me parece que la preexistencia es algo impresentable. Cualquier cosa que se haga tiene que ser eliminándola. También un sistema más solidario y fraterno, que necesita que todo el sistema esté acreditado. Y la sorpresa que tenemos es que de los 51 hospitales públicos sólo 11 están acreditados. El sistema público tiene que hacer un tremendo esfuerzo para acreditar toda su red. La ley también debe contemplar transparencia. En general, no es transparente, ni los laboratorios, ni los médicos, ni las clínicas y ése es un sistema que tiene que mejorar. Tiene que hacerse un esfuerzo para que haya más transparencia en toda la cadena.
-Estoy a favor de que el sistema tenga regulación, que sea más transparente, que se eliminen las preexistencias, que haya un sistema comparador de los planes que sean claro y fácil de entender y que sea homologado. Que cuando se reajusten los precios no sea al boleo, sino justificados. También que obligue a las aseguradoras a ser más eficientes, que obligue a hacer más gestión.
-Estoy en contra del fondo de compensación, porque es regresivo y no contribuye en nada. El actual sólo hace ricas a las isapres con los cotizantes más ricos. Eso es una insolencia social porque perjudica a los más pobres. Tiene que existir una integración público-privada. No tiene sentido que el gobierno haga tremendas inversiones donde no son necesarias. Un buen acuerdo es mejor. Me parece maravilloso cuando una persona no tenga cupo pueda ser operada en una clínica privada.
Para Santander el tema de la salud es importante y es por eso que también planteó la forma en que Fonasa debe ser administrado, ya que a su entender éste no debería estar bajo la tutela del Ministerio de Salud, sino que debería ser una institución independiente del Estado.
"Fonasa debe cambiar porque es lo menos transparente que existe (…) Debe tener un directorio y caminos propios, porque el poder de compra que tiene es gigantesco. Éste que es ejercido por los hospitales públicos provoca que desfinancien más porque lo que paga Fonasa no cubre los costos que tienen", afirmó. El ejecutivo sostuvo que con un sistema de aseguramiento competitivo del Estado se van a producir mecanismos mucho más equitativos, ya que se comprobó que hubo más de 500 mil personas que pagaban impuestos, pero no pagaban salud.