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Maestro de la cueca quiere dejar huellas en la zona del Bío Bío

El director de Los Chinganeros valora el gusto cuequero de los penquistas y trae su aplaudido curso para el próximo otoño.

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La cueca urbana ha calado hondo entre los penquistas en el último tiempo. Basta con pasar un martes en la noche por locales como La Bodeguita de Nicanor o El Averno para comprobar que no sólo hay un crecimiento en exponentes, sino también de seguidores, especialmente, universitarios.

Pero para que esta expresión artística popular siga creciendo en sonoridades y temáticas, también es necesario entrar en contacto con los maestros del género. Uno de los principales es Luis Castro González, director del conjunto Los Chinganeros.

Castro es discípulo de Fernando González Marabolí, y hoy es considerado uno de los principales difusores y maestros de la cueca urbana en el país. Esto lo ha cumplido mediante el curso "Canto a la rueda y cueca brava" dictado en distintas localidades de Chile. Este año es el turno de Concepción.

La instancia se realizará este otoño, durante los terceros fines de semana de cada mes. La primera cita es el próximo viernes en Infocap (Los Carrera 179). Para participar hay que contactar al mail luiscastrogonzalez@gmail.com.

Según el músico, en la actualidad no hay escuelas formales en Chile sobre el canto de la cueca. "Esto se debe a que somos pocos los cantores de la tradición que vamos quedando y que tenemos la voluntad de enseñar", comenta.

En cuanto a nuestra zona, agrega que "en Concepción hay un renacer de la cueca, que ha surgido como un fenómeno entre la juventud, quienes nos sorprenden y alegran al apropiarse de pianos en plazas penquistas. Hay que aprovechar este entusiasmo y apoyarlos a través de la enseñanza", explicó Castro, quien advierte que el Bío Bío mantiene una deuda pendiente con el género: Homenajear en vida a don Raúl Oliveros, gran referente de la cueca.

"Tal como lo hicimos en otras ciudades del país queremos motivar a más personas a que se integren y encanten con este movimiento cuequero, para que tome más fuerza y se continúen abriendo espacios para la cueca. Los jóvenes de esta generación nos están dando muchas enseñanzas. Han abierto una veta muy positiva, porque están valorando la cueca, buscan su identidad y se están acercando a los antiguos cultores", enfatizó el músico y tallerista.