Los Insolentes entran sin anestesia al circuito del rock
Ironías y agudezas del día a día montadas en pulsos musicales que siguen al revisionismo del rock en los últimos años. Es lo que trae la primera bandeja de composiciones que la banda penquista Los Insolentes toca hace un año en los escenarios locales.
El cuarteto va ganando público y sumando escenarios: Abrió el concierto de Los Bunkers en el Parque Ecuador, ante 20 mil personas, en el marco de la 50ª Feria del Arte, en febrero pasado (foto).
A la par de afianzarse más rápido de lo pensado -según confidencian- van traspasando en cada recital el carisma y fuerza de su vocalista. También llenan el espacio con el sonido certero y bailable que plantean Cristian Núñez (voz, guitarra), Víctor Hernández (batería, coros), Felipe Arriagada (guitarra, teclados ) y Eduardo Salgado (bajo, coros).
LA PARTIDA
La actual agrupación surgió por la necesidad de dar salida a maquetas que Núñez tenía bajo el brazo, surgiendo el par musical con Hernández (ambos integrantes originales de Fedeherratas). De ese modo, debutaron en la desaparecida La Crepería (21 de junio, de 2012), ubicada en un callejón de calle Colo Colo.
Sin las expectativas de abrir una conformación paralela -en ese entonces- ahora se encuentran con elenco estable, en plena elaboración de una primera producción EP con cinco temas y proyectando la ruta del año por el circuito penquista.
Acá ya marcan presencia y miran a Santiago, donde van a llegar con una impronta musical que levanta efectivos cuadros sonoros armados desde digitaciones de guitarras con aires crudos, una batería minimal, un bajo rendidor y sintetizador con la cuota pop.
CANCIONES REFERENTES
Los Insolentes, sensatos, expresaron que están recién partiendo y cultivan con mirada propia sus referencias rock tomadas del garaje (The White Stripes, The Strokes, The Black Keys), los clásicos (Beatles y The Rolling Stones), el Britpop (Supergrass, Beck) o contemporáneo chileno (Los Tres).
"Recién tenemos una formación que nos permite crear con mucha más libertad. Aun así, hemos trabajado rápido y tenemos bastantes canciones, algunas bien logradas y otras en proceso de producción. Con el lanzamiento de nuestro EP empezaremos a existir para el público. Tenemos claro que el camino es difícil, sobretodo en Chile, donde las artes -en general- están súper poco valoradas. Pero somos optimistas, porque creemos en lo que hacemos", apunta Víctor Hernández.
En esa cuerda, cuentan con un tridente de canciones y otras más que funcionan para los que buscan acompañar a la banda con coros desde el público y moverse al ritmo del bombo y la caja.
Aparecen en la combinación de líricas y sonidos provocadores de diversión. Además, dicen varias aserciones sobre el vivir corriente: "Shangrila', "Viejos tiempos', "Vienen y van", "Sasha grey", "Caballo negro", "Fiebre (ella no se controla)". Estos temas son el piso para la definición del trabajo en elaboración.
"Estamos en la etapa de edición y mezcla, ya tenemos los temas grabados. En cuanto a la masterización, buscamos donde hacerla. En este momento, el trabajo que vamos logrando y que seguimos nos tiene conformes, sobre todo por la autogestión y esfuerzos invertidos durante el 2013", destaca Cristian Zúñiga.