"En el gobierno anterior no había clima pro emprendimiento"
A pocos días de dejar su puesto, el titular de Corfo destaca el ambiente que se ha creado para emprender e innovar, repasa los principales hitos de la actual administración y lo que espera de las nuevas autoridades.
Es uno de los pocos altos personeros de gobierno que no ha tenido "bilaterales". Con sucesión aún indefinida, el hermetismo bacheletista -afirma- le ha impedido siquiera imaginar quién se sentará desde el 11 de marzo en su puesto.
Desde la vicepresidencia ejecutiva de la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), Hernán Cheyre realiza un resumen de los cuatro años de gestión: más de 800.000 beneficiados -especialmente en las regiones-, aumento en la cobertura de programas y con recursos presupuestarios similares, figuran entre los logros más importantes.
Pero el más relevante, advirtió, fue transferir el 35% de recursos que en 2009 se destinaba a apoyo a las grandes empresas hacia las micro, pequeñas y medianas. Y también la construcción de lo que denominó un "ambiente pro emprendimiento".
Ese mismo ambiente que en contraste, afirma, con la administración de Michelle Bachelet -donde se eliminaron 100 mil emprendimientos- no habría existido.
Entre las deudas, asume necesario avanzar en un instrumento legal que permita a los emprendedores "exitosos", esos dos o tres de cada 10 que reciben apoyo y transforman una idea innovadora en un negocio, devolver parte del apoyo recibido para partir. Y así dinamizar las ayudas para otros pares.
Según los datos de Corfo, el número de beneficiarios de programas vinculados al organismo se incrementó más de tres veces entre 2010 y 2013, aumentando desde 96.295 el 2009 a más de 270.000 el 2013. Las transferencias y programas crediticios movilizaron recursos por aproximadamente US$ 5.200 millones el 2013, triplicando los recursos el año 2009, con US$ 1.721 millones.
Cheyre asegura que mientras el 2009 el 35% de los recursos totales de Corfo fueron para las grandes empresas, el 2013 esta cifra no superó el 4% del total de subsidios, créditos y garantías. US$ 15.000 millones en recursos fueron destinados a las micro, pequeñas y medianas empresas.
"Los buenos resultados económicos que exhibe el país en crecimiento y creación de empleo muestran que había un ambiente para hacer cosas y llevar adelante expectativas de negocios. Y en eso están las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas, además de los nuevos emprendedores. Había un ambiente pro emprendimiento en general", asume Cheyre, para quien "no es casualidad" que en cuatro años se hayan creado 230 mil nuevas empresas.
El titular de la entidad afirma que descentralizar el apoyo al emprendimiento e innovación tuvo especial atención en las regiones, donde se aumentaron los recursos en 300%.
El Año del emprendimiento (2012), el Día nacional del emprendimiento (29 de abril), el Año de la innovación (2013), la Semana de la pyme (octubre), las ferias Arriba MiPyme o el programa Imagina Chile, entre otros, son parte de los esfuerzos desarrollados en su gestión .
Pero aunque el apoyo con recursos surge como un elemento central a la hora del balance, el vicepresidente ejecutivo de Corfo señala que otra parte de su trabajo fue "cambiarle la cara" a la entidad.
"Queríamos cambiarle la cara a Corfo y que no fuera sólo un lugar donde venir a sacar plata. Trabajamos en transformarnos en un puente que ayuda a conectar con entidades y soluciones", afirmó.
Cheyre agregó que junto a su equipo de trabajo, realizaron varias reformas internas en procesos y tipos de programas, tratando de eliminar la burocracia de la institución y transformarla en la conexión entre quienes quieren emprender e innovar y las soluciones adecuadas para cada caso en particular.
Uno de los ejes fundamentales que el vicepresidente ejecutivo de Corfo quiso imprimirle a su gestión era el fomento a la capacidad creadora. Lo que denomina libertad económica, idea central en el imaginario político del oficialismo.
"Creo que en el gobierno anterior no había un clima pro emprendimiento. La mejor respuesta es por qué se cerraron tantas empresas en esa época. Uno de los ejes fundamentales que le quisimos imprimir era que la gente pudiera desplegar su capacidad creadora y ejerciera su libertad, en contraposición al otro modelo que dice que los ciudadanos tienen derechos y hay un Estado que está siempre atendiendo los derechos de las personas", dijo Cheyre.
Para la autoridad, si bien el gobierno del Presidente Piñera no dejó de lado la protección de los derechos de las personas, si se preocupó de poner énfasis en que "la gente fuera el arquitecto de su futuro. Y eso requiere un ambiente pro emprendimiento. Ese discurso prendió mucho, lo que se refleja en la cantidad de nuevos emprendedores que hemos visto nacer".
Una de las iniciativas más importantes de Corfo fue el Programa de Garantías, que desde el año 2010 al cierre del 2013 entregó más de 200.000 operaciones que garantizaron créditos por más de US$ 11.000 millones.
El 97% de esos créditos, afirmó Cheyre, se orientaron a las micro y pequeñas empresas a través de 34 intermediarios financieros.
Es en este ámbito donde el titular de Corfo asume una deuda de su gestión. "Hay una responsabilidad de esa pyme que le fue bien y que pueda devolver el préstamo que la institución le entregó. Es de toda justicia, aunque en general la lógica histórica de Corfo es la entrega de subsidios no reembolsables. Lo he conversado con muchos emprendedores y les parece de sentido común", dijo, aunque reconoce que la dificultad está en encontrar la forma jurídica de llegar a una solución.
Para Cheyre, el trabajo de jóvenes innovadores está moldeando lo que considera una "fiebre" del emprendimiento en todo Chile. Y pone como ejemplo el programa Start Up Chile, que trajo a innovadores de varios países a desarrollar sus emprendimientos con una visa de trabajo y un aporte en dinero para echar a andar los proyectos.
"El éxito ha sido notable. Más allá del capital de riesgo que han levantado o del empleo que han entregado, lo importante es que se han mezclado con los emprendedores locales. Hoy un tercio de los emprendedores del programa son chilenos. Chile ya está en el radar de los temas de emprendimiento a nivel mundial", afirmó el titular de Corfo.
Uno de los aspectos importantes de la labor del organismo, comentó su vicepresidente ejecutivo, fue concretar el discurso regionalista con acciones. Así nacieron los comités regionales de asignación de recursos para cuatro macrozonas en todo el país, además de la instalación de centros de excelencia e incubadoras de negocios, cuyo ejemplo más importante es la instalada en la Patagonia, que abarca a las tres regiones más australes, y donde nunca antes hubo una entidad de este tipo.
"También tenemos programas de Capital Semilla que a contar de este año empiezan a funcionar con recursos regionales para gente de esas mismas regiones", dijo Cheyre, quien destacó también la masividad de las ferias ArribaMipyme en varias zonas. "Yo confío mucho en lo que se puede hacer en regiones", agregó.
Cheyre intenta no profundizar en el camino que puedan tomar las políticas de apoyo a la innovación y el emprendimiento en el gobierno que se instala el 11 de marzo.
Por un lado, no logra dilucidar quién lo va a reemplazar, por lo que no ha podido sostener reuniones para delinear el traspaso del mando en un organismo con importantes estamentos técnicos, donde más que los puestos de designación política, se valora la experiencia de profesionales que vienen trabajando desde hace varias administraciones.
Por otro, asegura que lo dejó contento leer el programa de gobierno de la Presidenta electa, Michelle Bachelet, en lo referente a temas de innovación y emprendimiento, donde se hace mención a la ampliación de la red de centros de excelencia en regiones.
"El concepto lo tiene incorporado y me parece fantástico que el país avance en esta dirección. Chile no empezó ahora ni hace cuatro años, sino que hay que ir construyendo sobre la base de lo que hay, valorando las cosas buenas que se hicieron", afirmó.
Para el titular de esta entidad, "así como yo he criticado algunas cosas que se hicieron en el periodo anterior, también aplaudo otras". "Puede haber diferencias de visión respecto de formas concretas de entregar apoyo, pero estoy convencido que temas como el emprendimiento y la innovación llegaron para quedarse. Es una ola que atravesó al país y le ha cambiado la fisonomía. La forma puede tener diferentes enfoques, pero estoy confiado en que las nuevas autoridades van a seguir con esta misma línea", agrega.
Cheyre, quien se tomará un trimestre sabático para escribir, leer y reflexionar sobre su futuro después de su paso por el mundo público, asegura que la existencia de centros de excelencia, una ley de incentivos tributarios y la posibilidad de crear empresas en un día y de forma virtual, es una suma de aspectos que hacen que Chile "la lleve" en este tema. Pero siempre desde una mirada local y sin emular iniciativas ajenas que, exitosas en sus lugares de origen, no se corresponden con la realidad nacional.
"No somos Silicon Valley, ni Israel ni pretendemos serlo. Hoy sí nos ven como un referente regional en términos de innovación y emprendimiento", comentó.
Autor del libro "Construyendo un país de emprendedores" (2012), donde hipotetiza sobre la posibilidad de que Chile puede llegar al desarrollo a través del trabajo y las externalidades de esta actividad, reafirma que luego de conocer en profundidad el trabajo gubernamental, no espera dejar totalmente la actividad pública. Aportar en políticas públicas en este ámbito puede ser uno de los resultados de estos tres meses de reflexión.