En los últimos 20 años, en la Región del Bío Bío han ocurrido 44.543 incendios forestales, los que han consumido más de 275 mil hectáreas. Esta es la cifra histórica que maneja la Corporación Nacional Forestal (Conaf) del Bío Bío de las temporadas que evalúan de octubre a abril.
El miércoles el director regional de la entidad declaró que esta temporada, 2013-2014, con sus 1.456 incendios forestales, es considerado como el peor inicio de periodo de los últimos 20 años. Esto, porque han debido, en algunos sectores, controlar entre 15 a 20 focos diarios.
A la fecha, los incendios ocurridos en diversas localidades, incluido el de Florida, han consumido más de 16 mil hectáreas.
La Región ha tenido en los últimos años varios incendios que han quedado en la retina de la comunidad. Uno de los más recordados fue el incendio de Quillón y Ránquil de 2012, el cual consumió más de 25 mil hectáreas en una semana.
Sin embargo, 13 años antes también se originó un siniestro de similar envergadura. Éste ocurrió en la Provincia de Concepción y afectó a la actual comuna de Chiguayante (en ese periodo era un sector de Concepción), Chaimávida y sectores aledaños a la ruta del Itata. En esa oportunidad se consumieron más de 30 mil hectáreas, incluido el pulmón verde de Chiguayante: el cerro Manquimávida.
Situaciones como estas son las que han ocurrido a lo largo de los últimos 20 años (ver infografía), es por eso la importancia de que las personas tomen conciencia de este problema, sobre todo en el periodo de sequía y altas temperaturas por el que está pasando el Bío Bío y que pronosticaban que iba a ser una temporada compleja.
El jefe de la carrera de Ingeniería Forestal de la Universidad de Concepción (UdeC), Eduardo Peña, comentó respecto a este tema que las condiciones que genera un siniestro, como son el combustible, el oxigeno y el calor (Triángulo del Fuego) están siempre presentes, por lo tanto, lo que varía y que influye en la cantidad de hectáreas afectadas es el clima que habrá en la temporada.
"Si hubo sequía, altas temperaturas y vientos fuertes, como ocurre ahora, el daño puede aumentar. Actualmente existe un cambio a lo que se llama régimen de incendio, ya que estos ocurren con más frecuencia, mayor intensidad, son más difíciles de controlar, además se dan en sectores donde no habían ocurrido antes", dijo.
El académico sostuvo que estos factores venían repitiéndose en ciclos de 10 años, pero el cambio climático ha provocado que se vayan acortando los años para que se originen incendios más grandes.
El director regional de Conaf también confirmó el planteamiento que realiza el académico de la UdeC. "Estamos en una condición de altas temperaturas, fuertes vientos y baja humedad relativa que favorece la propagación de los incendios", sostuvo Francisco Pozo.
No obstante, este cambio climático no exime de responsabilidad a las personas, ya que son los causantes del 90% de los siniestros.
Son cerca de 6 mil hectáreas las que ya ha consumido el incendio que se generó el martes en la comuna de Florida. Según el reporte que entregó el director regional de Onemi, Gonzalo Arroyo, la situación que ayer en al mediodía estaba controlada, se complicó en horas de la tarde debido al fuerte viento.
"Hoy (ayer) accedimos a las zonas interiores que ayer (miércoles) debimos hacer abandono debido a la velocidad del viento, que obligo a Bombero a evacuar a las personas de los valles interiores", contó.
Ayer el fuego de Florida llegó a sectores de Quillón como las localidades de Talcamo, El Peley y Chancal, donde debieron evacuarse cerca de 70 personas. Sin embargo, la última información es que este foco estaría controlado.
El hecho que ayer hubiera una día con menos temperatura, ya que amaneció nublado, fue recibido por las autoridades como un aliado en la lucha contra las llamas, que ya estarían parcialmente controladas.
"Ojalá que el pronostico no varíe y contemos con alguna precipitación, a fin de aumentar la humedad para disminuir la incidencia en los siniestros", declaró Arroyo.
Conaf espera por fin tener controlado el incendio el día de hoy, ya que ayer aún había focos activos.