El respaldo realizado por la Cámara Alta viene precedido por una pugna entre la oposición y La Moneda.
El Senado aprobó ayer la designación que realizó el gobierno de Pablo García como consejero del Banco Central (BC).
Por 27 votos a favor, la cámara alta ratificó la iniciativa propuesta por el Ejecutivo, luego que los integrantes de la comisión de Hacienda abordaran el oficio emanado por el presidente de la República, Sebastián Piñera.
Cabe recordar que dicha instancia parlamentaria también sirvió para escuchar al economista que sustituirá, desde ayer, a Manuel Marfán, cuyo período en el instituto emisor terminó a el 18 de diciembre pasado tras diez años en el organismo.
Pablo García se desempeñó como director ejecutivo por la Silla del Cono Sur (Argentina, Chile, Bolivia, Paraguay, Perú, Uruguay) en el Directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) y ocupó diversos cargos ejecutivos en el Banco Central, siendo gerente de la División de Estudios y Economista jefe entre diciembre de 2007 y octubre de 2010, gerente de la División de Política Financiera y gerente de Estabilidad Financiera entre febrero del 2006 y noviembre de 2007.
El respaldo realizado por la Cámara Alta viene precedido por una pugna entre la oposición y La Moneda.
El origen de la polémica estará, según han señalado los parlamentarios de la Nueva Mayoría, en que no se buscó un consenso o una negociación previa para elegir al candidato a consejero.
Y es que si bien el gobierno a través del ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, habría solicitado una lista de economistas afines al Partido Socialista (PS) representado por el senador Camilo Escalona -dado que el consejero saliente, Manuel Marfán es militante de ese partido- esta finalmente no se consideró y La Moneda optó por Pablo García, sin consultar con el PS ni la Nueva Mayoría, señalando que el economista del FMI pertenece al mundo de la centro-izquierda.
NO HAY RIESGO
Pablo García realizó su primera exposición pública ante la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta antes de su ratificación.
Afirmó que "gracias a la solidez de las instituciones de nuestro país, somos capaces de enfrentar las tareas que aún están pendientes para avanzar decididamente en la inclusión social y en enfrentar los desafíos económicos y sociales. Estos siempre estarán latentes, tal como lo vemos día a día en el mundo desarrollado y emergente. Por eso estimo que es crucial no caer en sobre optimismo ni complacencia, como tampoco creer que estamos blindados".
Agregó que "las autoridades deben mantener la guardia permanente, de forma de actuar preventivamente frente a riesgos. Así, se puede construir un proceso sostenido de incremento de la prosperidad y acceso a oportunidades para todos".
Dijo que su disposición a integrar el Consejo de esta institución "responde a mi convicción de tener la capacidad de contribuir exitosamente a la gestión de las políticas del Banco Central por los próximos años".
Destacó los desafíos que se enfrentan hacia adelante y que a su juicio tienen que ver con los riesgos externos, la regulación y supervisión financiera, y la relación entre crecimiento, inflación y política monetaria.
Señaló que el Banco Central tiene como objetivo resguardar la estabilidad de precios y la estabilidad financiera y, además, debe tomar en consideración la orientación general de las políticas del gobierno .